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El Consejo de Ministros autorizó una transferencia de crédito por importe de 29,3 millones de euros al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para apoyar al sector del vehículo eléctrico en Cataluña.
El objetivo es la implementación de programas de apoyo a proyectos de automoción vinculados al desarrollo del ecosistema del vehículo eléctrico y conectado, que faciliten a los fabricantes de vehículos el desarrollo de dicho ecosistema y que cumplan criterios que avancen hacia la transición verde y la innovación del sector.
¿Por qué el vehículo eléctrico?
El vehículo 100 % eléctrico es la forma más eficiente de descarbonizar el sector transporte. El transporte es responsable de cerca de la mitad de la contaminación en las ciudades. Un cambio hacia la movilidad eléctrica mejoraría la calidad del aire ya que estos vehículos no utilizar ningún tipo de combustible fósil y por tanto no emiten gases de efecto invernadero. Tanto el vehículo ligero, como los autobuses o los camiones son susceptibles de ser electrificados de forma eficiente.
En el marco de un sector transporte caracterizado por un elevado consumo de combustibles fósiles y un fuerte impacto ambiental, la promoción del vehículo eléctrico se presenta como una de las vías esenciales para conseguir una eficiente transición energética y, por el lado de la oferta, para avanzar hacia la sostenibilidad del sector.
En este marco, la Unión Europea se enfrenta a un ambicioso triple objetivo:
- La competitividad de su economía en un contexto de crisis económica.
- La protección al medioambiente, fuertemente enfocada en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
- La seguridad de suministro, cuyo principal objetivo es la reducción de la dependencia energética de combustibles fósiles del exterior.
Si se quieren alcanzar los objetivos europeos de cero emisiones netas en 2050, habrá que realizar grandes esfuerzos en el sector transporte, el principal consumidor de energía de la economía y dependiente en más de un 90 % de los combustibles fósiles. En España, el transporte es el sector que más energía consume, equivalente a un 42 % del total nacional. En concreto, el porcentaje que representa el sector del automóvil (turismos) es del 17 %. El desarrollo del mercado del vehículo eléctrico podría reducir este porcentaje y de esta forma aportar mayor sostenibilidad al sistema.
España debe ser capaz de movilizar inversiones suficientes para el desarrollo y la fabricación de vehículos eléctricos
Todo esto como palanca esencial necesaria para seguir manteniendo su pujanza en este sector y no perder lo que sería equivalente a un 22 % de la producción total de vehículos en 2018.
Tradicionalmente, Cataluña “ha ocupado una posición líder en el sector de los vehículos comerciales, industriales, autobuses y autocares dentro de España” y existe una necesidad de acelerar la descarbonización promoviendo un cambio en el sector de automoción, así como de intensificar los apoyos “en una región de alto impacto que contribuirá de forma relevante a la consecución de ese objetivo”, según destacó el Gobierno.
El Consejero de Empresa de la Generalidad, Roger Torrent, explicaba que la transferencia directa de 29 millones por parte del Gobierno central complementa otra aportación de 60 millones de fondos propios de la Generalidad Catalana con los que se va a dotar a Seat-Volkswagen.
A la espera de que el Gobierno decida si cambia las reglas del juego y da más papel a las autonomías tras cerrar el primer Perte con el 70 % de los recursos sin adjudicar, el titular del departamento catalán de Empresa y Empleo urge a abrir la nueva convocatoria lo antes posible.
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