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El volcán de la isla de La Palma sigue activo tras más de 60 días y este pasado lunes llegó por tercera vez al mar, generando un nuevo delta lávico. Se trata de la colada 7, la cual posee mayor material magmático tras el desemboque de la colada 4. Ambas se han unido hasta llegar al océano. Esto ha obligado el confinamiento de unas 3.000 personas durante al menos 24 horas. Entre esas zonas se encuentra Tazacorte, San Borondón y el espacio de El Cardón hasta el Camino de los Palomares.
Se trata del cuarto punto de acceso de lava al mar desde el inicio de la erupción
Esta vez se trata de la colada norte, situada cerca de Tazacorte y La Laguna. Se trata de una zona que aún no había sido engullida, donde aún permanecían viviendas y cultivos. La gravedad de este delta lávico es que está cayendo cerca de la población que no está evacuada y además es el que mayor aporte de energía viene recibiendo. Por eso, el Plan de Emergencias Volcánica de Canarias (Pevolca) ha extendido las recomendaciones a todos sus municipios como el uso de las mascarillas FFP2, que la población apenas salga a la calle, solo para lo necesario, que sellen las ventanas y que apaguen los sistemas de calefacción.
Debido a la proximidad de la colada del volcán con las zonas pobladas de Tazacorte, se han visto obligados a confinar a la población de la localidad junto a la barriada de San Borondón y los habitantes que viven entre El Cardón y el camino Los Palomares. El alcalde de Tazacorte muestra su preocupación ante los posibles afectados.
La nube de gases y cenizas del volcán mantienen inoperativo el Aeropuerto de La Palma
La gran cantidad de gases y cenizas provenientes del volcán, ha provocado que el Aeropuerto de La Palma se mantenga inoperativo y según la previsión meteorológica, se espera que las incidencias continúen en los próximos días. La preocupación por la presencia de gases tóxicos mantiene a la población canaria en tensión. La portavoz científica del PEVOLCA, Carmen López, añadió que aún es pronto para sacar conclusiones sobre el descenso en la emisión de dióxido de azufre. Por ello, es importante esperar a las siguientes mediciones.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) se encuentra haciendo mediciones de gases en la zona donde se presencia la colada número 7 en el mar. Miguel Ángel Morcuende, de la unidad militar, explicó que el levantamiento del confinamiento domiciliario dependería de la distancia y conocimiento sobre estos gases.
La superficie afectada supera ya las 1.060 hectáreas
Pevolca ha informado que la llegada al mar de una nueva colada y la emanación de gases nocivos ha llevado a un confinamiento preventivo de la población de barrio de Tazacorte. El resto de las coladas se mantienen estables. La superficie afectada supera las 1.060 hectáreas, el delta lávico tiene una extensión de 43 hectáreas desde la orilla y la llegada de la nueva colada al mar hace que se produzca un nuevo delta.
La actividad estromboliana con la emisión de piroclastos y cenizas se mantiene, por lo que estiman una calidad del aire que no es del todo buena. El Pilar y La Grama registran niveles más desfavorables.
Mientras que la lava continúa arrasando todo lo que ve por delante, la población canaria aguanta tan largo sufrimiento con la esperanza de que pronto, puedan despertar de este mal sueño.
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