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La elección de la fecha para las próximas elecciones generales ha levantado muchas voces y generado reclamos, sorpresa y todo tipo de suposiciones. Lo ha hecho al coincidir con una época del año que los españoles suelen elegir para iniciar sus vacaciones de verano y la mayoría no estarán en sus ciudades y puede que ni si quiera en el país. Las solicitudes de voto por correo se han elevado por este motivo, pero también ha habido otras complicaciones: constituir la mesa electoral.
Uno de los mayores miedos de los ciudadanos no era el de no poder ir a votar, con el voto por correo esa cuestión queda solventada. El verdadero temor surge en el momento en que la mayoría de los ciudadanos somos susceptibles de pasar a formar parte de una mesa electoral y que nos coincida con nuestros planes de vacaciones. Ante las dudas y los reclamos, el Gobierno incluyó las vacaciones como causa justificada para no tener que acudir a una. Pero ha traído consecuencias.
Ponferrada solo contará con una mesa electoral de 84 que necesita
Si tratamos el tema con cierto humor, podríamos decir que salir del Ikea en menos de 10 minutos es mucho más factible que conformar una mesa electoral para algunas ciudades, sobre todo en aquellas con una densidad de población reducida. Un claro ejemplo de esta situación es Ponferrada, ciudad de Castilla y León, donde se vive un "panorama desolador", como lo ha calificado la Junta Electoral de esta ciudad.
¿Por qué desolador? Porque tan solo han conseguido constituir una mesa electoral de las 84 previstas para el 23j. Es importante señalar que ya hubo problemas en las elecciones municipales del 28M para lo mismo, pero la situación se ha agravado debido al adelanto de las elecciones generales y su coincidencia con la temporada vacacional. Por supuesto el problema central es la poca cantidad de gente que reside de forma habitual en la zona, pero también las alegaciones para no formar parte de una.
Alegaciones que no solo han sido por cuestiones de viajes organizados, de hecho, desde la Junta Electoral de Ávila, ciudad que apenas ha conseguido organizar 156 de 361 mesas, comentaron que han estado recibiendo excusas y alegaciones, en concreto más de 250, de lo más insólitas y "que no ha habido en otras elecciones", según recogía el medio El Mundo. Y es que Castilla y León en general está teniendo grandes dificultades para conformar una mesa electoral.
¿Mala fecha o estrategia?
Las vacaciones no son el único factor que echa para atrás a las personas para formar parte de una mesa electoral, también lo es el calor. Por estos dos motivos, desde partidos de la oposición y otros analistas políticos, ven en la decisión del Gobierno de adelantar las elecciones generales una completa estrategia política, cuyos resultados de momento están por verse, pero señalan que ha sido para reducir el número de votantes para el 23j.
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