España se posiciona como el tercer país europeo con el Salario Mínimo Interprofesional más caro

La subida de los precios y en general el encarecimiento de la vida, ha hecho que el salario mínimo se encuentre en el punto de mira. Hace pocos meses se aprobó una subida de esta remuneración para desahogar un poco a los hogares. Una subida que las empresas españolas tuvieron que asumir y ahora, el último informe de la patronal Cepyme, muestra que con este incremento, España se ha posicionado en el puesto número tres del ranking europeo en cuanto a coste de cotizaciones sociales que afrontan las empresas.

El Salario Mínimo Interprofesional español es uno de los más caros de Europa

El Cepyme, señala a este hecho como a uno de los "frenos" para el tejido productivo y el crecimiento de las empresas del país. Las cifras que se manejan en este informe, hacen referencia específicamente al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y lo sitúa entre los más caros de afrontar para las empresas, en forma proporcional. El informe señala que entre 2017 y 2022 se ha vivido uno de los mayores incrementos de los últimos años, llegando a subir en un 41,3 %.

De igual modo, señala que el coste laboral total mínimo que debe afrontar una pyme española es de los más altos de Europa. La suma de cotizaciones y otros costes laborales hace que el coste mínimo de contratar a un empleado sea para las pequeñas empresas (entre 10 y 49 empleados) el equivalente al 136% del salario mínimo. Sólo tres países de Europa (Lituania, Francia y Bélgica) tienen un coste mínimo de contratar a un asalariado superior al de España.

Los impuestos elevan los costes

Entre los principales factores que generan este desequilibrio en el salario mínimo, se resalta principalmente al Impuesto de Sociedades español, al que posicionan por encima de los de países como Dinamarca, Portugal, Suecia, Finlandia y Polonia, además de, al menos, otros 13 países europeos, de acuerdo con el análisis del estudio. Pero no es el único señalado, ya el Cepyme también sostiene que el IRPF es uno de los más altos de Europa.

Estos factores son los principales encarecedores del Salario Mínimo Interprofesional, lo que acaba derivando en un freno al crecimiento. “Estos frenos al crecimiento empresarial español provocan que las pymes españolas sean menos rentables que los países de nuestro entorno", remarca el informe y añade que España tiene el mayor porcentaje de “mortalidad empresarial”, ya que más del 9% de las empresas desaparecen al año y solo la mitad de las empresas siguen vivas tres años después de su creación.

Buscar un equilibrio

Actualmente, sindicatos y otras organizaciones, están trabajando en negociaciones con el Ministerio de Trabajo para que se vuelva a subir el Salario Mínimo Interprofesional. Desde organizaciones internacionales como la OCEDE se advirtió que con la presión actual de la inflación y el SMI, muchos hogares españoles podrían verse en situaciones de alta vulnerabilidad. Proteger el tejido empresarial es una prioridad, al igual que hacerlo con las familias y el verdadero trabajo estará en encontrar un equilibrio para ambos.