Un estudio ha demostrado que en lugar de un bastoncillo, que muchas personas encuentran desagradable, se puede realizar una prueba de detección de Covid-19 en muestras de lavado de gárgaras.
Los estudios afirman que las personas que han pasado la Covid-19 y las que han recibido dos dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech tienen anticuerpos capaces de bloquear la variante del SARS-CoV-2 descrita en Inglaterra.
La crisis sanitaria derivada de la Covid-19 ha agravado el impacto en el día a día de millones de mujeres en el mundo, según diversas organizaciones y socios locales con los que trabaja Manos Unidas.
Una tarea que ejercen, eminentemente, las mujeres, y que si este último año ha sido más indispensable que nunca, por las necesidades de enfermos, menores, ancianos y dependientes durante la pandemia.