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El precio del aceite de oliva ha aumentado drásticamente en España, subiendo un 115 % desde que comenzó la escalada. Esto preocupa a los consumidores, ya que el litro se acerca a los 10 euros y está contribuyendo a la inflación alimentaria. Las malas cosechas debido a la sequía son la principal causa de este aumento de precio, con una producción un 55 % menor que el año anterior. Esto contrasta con los precios más bajos en países vecinos, a pesar de que España es el principal productor de aceite.
El aumento del precio del aceite de oliva preocupa a asociaciones y consumidores
El precio del aceite de oliva se ha convertido en una preocupación primordial para los consumidores en España. Con un litro casi alcanzando los 10 euros, es el producto que más está contribuyendo a la inflación alimentaria. Esto se debe principalmente a las malas cosechas causadas por la sequía en el campo, con una producción que ha caído un 55 % en comparación con el año anterior y muy por debajo de la producción habitual de España, que es de 1,4 millones de toneladas.
Este declive en la producción ha tenido un impacto significativo en el precio, que ha aumentado un 52,5 % en el último año, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto representa el mayor aumento anual desde que se tienen registros y coloca al aceite de oliva como el producto que más ha subido en la canasta de compras.
La situación es especialmente preocupante considerando que, en países vecinos, el aceite es mucho más económico que en España, a pesar de que España es el principal productor. La diferencia de precios entre supermercados y marcas es significativa, llegando hasta un 68,1 % para el aceite de oliva virgen extra. La asociación de consumidores Facua está pidiendo al Gobierno que investigue estos aumentos de precios y aplique límites a los márgenes de beneficio en la cadena de suministro.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, atribuye este aumento de precios a las malas cosechas y espera que la próxima temporada sea más productiva y, por lo tanto, que los precios disminuyan. Sin embargo, la incertidumbre persiste y los consumidores sienten la presión en sus bolsillos mientras el precio del aceite continúa su escalada.
Un aumento de precio constante
El precio del aceite ha experimentado un aumento constante durante 29 meses consecutivos. Desde marzo de 2021 hasta agosto de 2023, el precio ha aumentado en casi un 115 %, un incremento significativo del 114,8 % para ser precisos.
Este aumento de precios también se refleja en el gasto promedio por hogar en aceite de oliva, que ha alcanzado los 97.7 euros al año en 2022, en comparación con los 77.6 euros de 2021. Esto representa un incremento del 26 %, a pesar de que el consumo en litros apenas ha aumentado, subiendo menos del 3 % (de 21.5 litros por hogar en 2021 a 22.1 litros en 2022), según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
¿Cuál es el precio del aceite en la actualidad?
En particular, el precio promedio por litro de aceite virgen extra, que es la variedad que más ha aumentado, actualmente se sitúa en 9,67 euros, según un estudio realizado por la asociación de consumidores Facua, que comparó los precios de hasta 50 marcas en ocho cadenas de supermercados.
Esta situación preocupa a los consumidores y contribuye a la inflación alimentaria. La variación de precios entre marcas y supermercados puede llegar al 68,1 %. La asociación Facua pide una investigación del Gobierno y límites en los márgenes de beneficio. España es el mayor consumidor de aceite de oliva, lo que también influye en los precios más altos en comparación con otros países.
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