Lectura fácil
Pocas cosas hay en nuestra imaginación que se le resistan a los avances de la tecnología y más aún si se trata de cubrir algún tipo de necesidad que pueda ayudarnos a vivir más y mejor. En este sentido, el desarrollo en medicina es cada vez más sorprendente, como el último diseño patentado por un grupo de investigadores estadounidenses, que han conseguido crear una 'tirita' de biofilm, capaz de aprovechar nuestro sudor para producir electricidad.
Uno de los principales, y más ambiciosos usos de estos parches de biofilm, es el de poder dotar de energía a implantes médicos que la necesiten. Pero más allá de ello, también se encuentra en las perspectivas de futuro de estos investigadores, el poder utilizarlos para realizar cargas de dispositivos electrónicos pequeños, haciendo uso únicamente la energía de nuestros cuerpos. Algo con lo que ya se jugó en la ciencia ficción para aquellos que recuerden la película 'Matrix'.
Un biofilm capaz de cargar tu móvil usando tu calor corporal
"Estamos ante una tecnología muy emocionante", comenta Xiaomeng Liu, uno de los principales autores del estudio presentado por la Universidad de Massachusetts Amherst, en Estados Unidos. "Es energía verde real y, a diferencia de otras fuentes llamadas de 'energía verde', su producción es totalmente verde", explica en su artículo sobre este gran éxito de desarrollo en energías limpias. Pero, ¿Cómo es y como funciona este biofilm?
Este biofilm está compuesto por una lámina delgada, aproximadamente con el grosos de una hoja de papel, hecho a partir de la generación de las células bacterianas conocidas como Geobacter sulfurreducens, capaces de producir electricidad. Estas bacterias ya se habían puesto a prueba con anterioridad, la clave de este estudio se encuentra en la modificación que ha conseguido mejorar su eficacia, introduciendo una biopelícula que genera energía a partir del sudor que encuentra en la piel.
Derek Lovley, coautor del estudio, explica que han "simplificado el proceso de generación de electricidad al reducir radicalmente la cantidad de procesamiento necesario. Cultivamos de manera sostenible las células en una biopelícula y luego usamos esa aglomeración de células. Esto reduce las entradas de energía, simplifica todo y amplía las aplicaciones potenciales", por eso su próximo paso a futuro será el de "aumentar el tamaño de nuestros parches para alimentar dispositivos electrónicos más sofisticados que se pueden llevar en la piel", añade Jun Yao, otro de los autores.
Una fuente de energía inexplorada
En la película 'Matrix', se utilizaba el calor humano para generar una fuente de energía inagotable y más limpia. Pero fuera de la ciencia ficción, el cuerpo humano aún es un área amplia en la que explorar. Jun Yao comenta que nuestra piel "es una enorme fuente de energía sin explotar". Una fuente a la que estos investigadores han conseguido acceder a través de un parche de biofilm pequeño, flexible y delgado, que además acaba con las limitaciones de movilidad actuales, como por ejemplo, que tengamos que tener enchufado el cargador a la red eléctrica, o incluso, en un futuro, acabar con la dependencia energética.
Añadir nuevo comentario