¿Qué es el bruxismo y cómo se puede prevenir?

Quizás en algún momento de tu vida escuchaste hablar sobre la enfermedad bucal caracterizada por apretar o por rechinar los dientes mientras sobre todo por la noche. Pues bien, es lo que se conoce como bruxismo, un acto muscular involuntario y característico de nuestra sociedad estresada.

¿Por qué es importante tratar el bruxismo?

Actualmente existen muchas enfermedades bucales relacionadas con la calidad de vida de las personas, es decir, relacionadas con los momentos de ansiedad, estrés o depresión, lo que termina por afectar negativamente a nuestra boca. Es el caso, por ejemplo, del bruxismo, una enfermedad bucal caracterizada por apretar o por rechinar los dientes, sobre todo por la noche.

Este mal hábito tiene consecuencias muy serias si el problema no se detiene a tiempo. Y sí, aunque el bruxismo sea caracterizado por ser sonoro, se trata de una enfermedad silenciosa, ya que el paciente no se da cuenta de que la padece a menos que se lo digan. A ello se suma la necesidad de hacer este acto durante el día, ya sea por estrés o ansiedad, lo que hace que la persona que lo padece no sea consciente de ello.

A pesar de que se trate de un acto involuntario, el bruxismo debe tratarse lo antes posible, ya que al rechinar o apretar los dientes de forma excesiva, puede desgastarlos poco a poco. También se ven afectados las encías y el esmalte de los dientes, lo que en algunas ocasiones ha pasado a casos peores, llegando a afectar a las articulaciones y a los músculos.

La fisioterapeuta especializada en disfunción craneomandibular, Daniela Toro Mattozzi, señaló durante una entrevista con Infosalus que existen tres tipos: cuanto aprietas los dientes y no hay fricción, de forma que hay desgaste de las cúspides de los dientes y la encía tiene a retraerse; cuando rechinas, y se produce un desgaste de los dientes llegando a quedarse planos; o cuando tiene lugar una contracción muscular y sin contacto dental.

¿Existe algún tratamiento específico para esta enfermedad bucal?

En la actualidad hay diversos tratamientos en función del padecimiento. La clínica dental Dra. Eva Marcos señala cuáles son los principales:

1. El dolor mandibular y la hipersensibilidad a los alimentos dulces son síntomas del bruxismo. Para aliviar la molesta, puedes usar hielo envuelto en un paño para desinflamar la zona y pedir cita con el odontólogo.
2. Ortodoncia para alinear los dientes, ya que la mala alineación es un desencadenante de la enfermedad.
3. Rehabilitación protésica: si llevas un tiempo con esta enfermedad y te afectó la articulación mandibular, el especialista te recomendará una rehabilitación protésica.
4. Férula de descarga: es una prótesis ajustada a la dentadura que ayudará a evitar rechinar los dientes durante la noche.

También existen formas de mejorar el bruxismo en nuestro día a día. La experta Mattozi aconseja primero el estilo de vida, la parte emocional e incluso la alimentación; además de las mini rutinas como mantener la lengua arriba, sobre el paladar, pero detrás de los dientes.

A todo ello se le suman estiramientos de la musculatura para relajar los músculos, y lo más importante, evitar situaciones de estrés y ansiedad que terminan por causar esta enfermedad bucal.