Carles Puigdemont, la ley de Amnistía y su regreso impune

Con la ley de amnistía aprobada, el expresidente catalán, Carles Puigdemont, podrá regresar a España, sin ser detenido, a pesar de su procesamiento por desobediencia y malversación.

Claro que, para Oriol Junqueras, que ha sido condenado por los mismo delitos, continuará con su inhabilitación hasta dos meses, según el tiempo que considere oportuno el Tribunal Supremo para estudiar su caso.

Y es que la proposición que se presentará en el Congreso de los Diputados fija que "quedarán sin efecto las órdenes de busca y captura e ingreso en prisión de las personas a las que resulte de aplicación esta amnistía, así como las órdenes nacionales, europeas e internacionales de detención".

Carles Puigdemont, el agraciado con Sánchez, los pactos y su reelección como presidente

Carles Puigdemont, continua procesado con la orden de detención nacional, para que el instructor del 'Procés', le tome declaración para dar conclusión al procedimiento penal, que sigue abierto tras la celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Claro que, podría dar su declaración de forma voluntaria, o directamente que las autoridades ejecuten su orden de detención. Pero todo ha cambiado, ya que una vez que la ley de Amnistía quede publicada en el Boletín Oficial del Estado, Carles Puigdemont podría pisar suelo español con total libertad.

La situación de su colega, Oriol Junqueras no es tan buena, pues él ya juzgado y condenado por el 1-O por los mismos delitos, a 13 años de cárcel e inhabilitación.

Pero tampoco está tan mal, pues tras el indulto y la reforma penal que derogó el primer delito y causo la modificación del segundo, ha visto su condena reducida a la imposibilidad de ejercer como cargo público hasta el 2031.

Así, la proposición de Ley detalla que los jueces tienen un plazo máximo de dos meses para aplicar la amnistía de forma preferente y urgente.

De esta forma, y según detallan algunas fuentes, será el tribunal sentenciador el que decida si se aplica o no la ley de amnistía para Carles Puigdemont y el resto de condenados por el procés, y si se mantienen las penas vigentes.

Además, en el caso de los condenados, la amnistía "no dará derecho a percibir indemnización de ninguna clase ni generará derechos económicos de ningún tipo en favor de persona alguna". Y recalca que tampoco dará derecho a la restitución de las cantidades abonadas en concepto de multa.

Asimismo, que finalmente se conceda el indulto total o parcial antes de que entre en vigor la ley de amnistía, "no impedirá la revisión de la sentencia firme, pero no se revisarán las resoluciones judiciales firmes que hubieran apreciado la extinción de la responsabilidad criminal a causa de la prescripción del delito".

Jueces y tribunales tienen poder para frenar la amnistía

Ellos pueden ejercer diversas acciones para detener la amnistía, y en el caso del Supremo, el juez Llarena tendría que concluir el sumario sobre Carles Puigdemont para que así la Sala de lo Penal se dirigiera al Tribunal Constitucional, además que los magistrados que condenaron el 1-O podrían acudir a la corte de garantías.

Según los expertos, recuerdan que el actual marco jurídico las cuestiones de inconstitucionalidad que puedan plantear el Supremo o cualquier otro juez o tribunal con las causas afectadas por la amnistía, suspenderían de forma automática la aplicación de la ley en los casos concretos hasta que el TC diera resolución.

En definitiva, Carles Puigdemont puede llegar a una España con un panorama judicial bastante enrevesado, además de que serán los jueces y tribunales quienes decidan la aplicación uno por uno de la amnistía, esta añade que esto se hará sin perjuicio de los recursos, pues no tendrán efectos suspensivos.