Los centros de día suponen una opción muy adecuada y beneficiosa para nuestros mayores

Cuidar a nuestros mayores se ha convertido en una misión para todos nosotros y para los profesionales del sector. La demanda de las residencias de mayores es cada vez mayor y muchas familias no pueden permitirse pagar el alojamiento y el uso de las mismas.

Sin embargo, existen los centros de día, una opción menos conocida, pero que ofrece todos los servicios y atenciones especializadas para nuestros mayores. Además, mantienen las visitas de los familiares más cercanos.

Centros de día: una opción poco conocida, pero muy demandada

El cuidado de nuestros mayores ha pasado a un primer plano, ya que cuidar de quienes nos han cuidado es una misión que todos tenemos en la vida. Existen ocasiones donde muchas familias no pueden hacerse cargo de sus mayores, por lo que recurren a las residencias de ancianos.

Sin embargo, muchas residencias cuentan con gastos muy elevados, y no todas tienen una plaza disponible ni un servicio a tiempo completo. Es por ello por lo que surgen los centros de día, una opción poco conocida, pero muy demandada en la actualidad.

Los centros de día ofrecen servicios y atención personalizada en función del grado de dependencia y el estado de salud de la persona. Además, permite las visitas de familias en un amplio abanico de horas.

La directora del Centro de Día El Plantío de Ponferrada, Gemma Sagredo, explica que las personas mayores “vienen al centro y realizan ejercicios que fomentan su actividad física y psíquica y, al mismo tiempo, conceden tiempo a los hijos para que puedan ir a trabajar tranquilamente”.

Una vez que los familiares terminen sus labores, las personas de estos centros vuelven a su casa y cuentan todo lo que han hecho, aseguran.

Distintas actividades y servicios en función de las necesidades del paciente

Cuando una persona accede a los centros de día, inmediatamente se accede a sus antecedentes e informes sobre su estado de salud. Una vez en conocimiento, los profesionales de los centros se ponen en marcha con actividades que ayudan a su integración y a su salud. Los servicios cuentan con sesiones de fisioterapia e incluso apoyo profesional para asistir en el aseo personal.

Asimismo, los centros trabajan en las conocidas AVD (Actividades en la Vida Diaria), lo que les ayuda a fomentar la autonomía personal en su día a día, ayudando así a sus capacidades.

Otro aspecto muy importante es la socialización. El contacto con el resto de los usuarios de edades similares es muy beneficioso para su desarrollo intelectual y psicológico, así como para fomentar el envejecimiento.

La idea no es “recuperar” las capacidades, sino evitar el deterioro y el sedentarismo en las personas mayores.

Un contacto permanente con sus familiares

Como hemos mencionado, todos los trabajadores de los centros ofrecen una atención muy especializada para las personas que lo requieren. Pero, además de estos beneficios, los centros de día mantienen una estrecha y constante relación con los familiares del paciente.

En general, todos los usuarios de los centros de día están contentos de la existencia de estos centros, ya que ayudan a sus familiares a seguir creciendo en todos los aspectos de su vida sin olvidar a sus familiares, quienes también los acompañan en este trayecto.