¿La cerveza ayuda a calmar la sed? Descubre toda la verdad acerca de ella

Con los días de calor, los refrescos y sobre todo la cerveza, son nuestros mejores aliados. Sin embargo, muchas personas se preguntan si de verdad esta bebida alcohólica ayuda a quitarnos la sed. Veamos si se trata de una realidad o simplemente de una apariencia más.

El consumo de cerveza a la hora de hidratarnos

El buen tiempo, la cerveza, una buena compañía… En la época de verano, los bares y restaurantes se llenan hasta su tope, lo que también ayuda a mejorar la situación tan complicada que ha vivido la hostelería. Sin embargo, no venimos a hablar sobre el turismo, sino sobre el consumo de las cerveza para saciar nuestra sed.

Pues bien, el doctor y coordinador del Grupo de Nutrición de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), José Manuel Fernández García, menciona durante una entrevista a Infosalus que “el consumo de bebidas fermentadas de baja graduación, como la cerveza o el vino en cantidades moderadas, se acepta por no empeorar el perfil cardiovascular pero dentro de un perfil de dieta mediterránea. No es cuestión de promover su consumo, y no son buenas opciones para calmar la sed”.

Asimismo, el doctor insiste en que durante los días de calor se deben evitar bebidas con alcohol y bebidas gaseadas. También recuerda que el agua es una de las mejores bebidas para calmar nuestra sed, pero también muchas frutas y verduras que contienen agua y fibra, indispensables para nuestra alimentación y épocas de calor.

¿Cuánto debemos beber durante el verano?

Mantenerse hidratados en los días de calor es lo más importante y recomendado por los expertos. De vez en cuando no es muy perjudicial tomarse alguna que otra cerveza, ya que también podemos disfrutar de ella. Sin embargo, el agua es el líquido más recomendado.

Por eso, el doctor Fernández nos recuerda la importancia de mantenernos hidratados, por lo que recomienda beber entre 3 y 6 vasos de 200 mililitros al día, es decir, un litro o litro y medio de agua diario.

“Beber más de 3 litros es contraproducente porque produce una sobrecarga de volumen que en personas que padecen enfermedades renales o cardíacas puede llegar a producir síntomas respiratorios y alteraciones a nivel renal”, advierte.

La deshidratación, un peligro muy cercano

Otro aspecto que señala este médico de familia a Infosalus es que la deshidratación en las personas mayores puede llevar a estados de confusión mental, disminución de la capacidad de concentración o de cefalea que pueden disminuir la funcionalidad del riñón, ya que se produce menos orina y, por tanto, menos productos de desecho.

En general, el agua es un básico en nuestro día a día, por lo que evitar las bebidas carbonatadas y con gas es muy importante. Aun así, la cerveza no se posiciona como una “bebida peligrosa”, aunque un exceso de ella sí que puede entorpecer nuestro sistema urinario y nuestro organismo en general.