01/04/2021 - 11:30
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El tiempo invernal volvió a parte de España coincidiendo con el puente de San José y la llegada de la primavera astronómica. Las temperaturas diurnas se desplomaron a entre 5 y 10 grados por debajo de lo normal en la mayor parte del país.
Entre fortísimas rachas de viento y a medida en que la lluvia invade la península, la Agencia Estatal de Meteorología eleva el nivel de alerta de borrascas: pronto podríamos estar ante una ciclogénesis explosiva de nivel continental.
¿Qué es una ciclogénesis explosiva?
La ciclogénesis explosiva es un fenómeno meteorológico que se produce al chocar una masa de aire caliente, con otra de aire frío.
El encuentro de las diferentes masas desarrolla rápidamente una profunda borrasca en un periodo muy corto, dando lugar a vientos muy intensos y fuertes lluvias. Los flujos de aire que originan son tildados por algunos meteorólogos como "vientos perfectos". La potencia de este fenómeno hace que también se las denomine "bombas meteorológicas", por sus efectos destructivos. Normalmente, cuando toca tierra su intensidad y velocidad descienden rápidamente.
Ya se han dado tormentas similares en España a lo largo de estos años, como en 1998, 2009, 2010 o 2013.
¿Cuáles son las consecuencias de este fenómeno? ¿Qué podemos esperar?
La variabilidad de una ciclogénesis explosiva es amplia, pero no hay buenas noticias. Las ciclogénesis explosivas suelen generar lluvias torrenciales, intensas nevadas y vientos que alcanzan los 150km/h.
Son breves, pero causan grandes estragos tanto en tierra como en el mar. Es decir, si se da una ciclogénesis explosiva nos esperan un par de días malos, quizá algunos más. Los vientos huracanados, las inundaciones y las borrascas secundarias pueden acompañarnos durante toda la Semana Santa.
¿Qué hacer ante una ciclogénesis explosiva?
Algunas recomendaciones a tener en cuenta durante una ciclogénesis son las de asegurar elementos que puedas tener en casa, como toldos, persianas o antenas, y si sales a la calle no caminar por parques y avenidas llenas de árboles, ya que las ramas pueden caer en cualquier momento.
También es aconsejable no pasar debajo de andamios o cerca de postes de luz, y si tienes que conducir hacerlo a una velocidad más moderada de lo habitual y evitar las carreteras próximas a las líneas de playa, debido al fuerte oleaje que se puede producir.
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