Las comidas navideñas más tradicionales de cada región española

Te presentamos la lista imprescindible de las comidas navideñas más tradicionales de cada región española. No es fácil establecer un menú generalizado, pero sí los más destacados por las abuelas, los que se comen desde antaño, los que nunca fallan, acompañados de sus bebidas típicas.

Andalucía

Los andaluces comen frecuentemente de aperitivo jamón, queso, huevos rellenos, gambas o embutidos como los chicharrones o el chorizo. El marisco es uno de los entrantes estrella, seguidos de sopas como el puchero. De plato fuerte pueden comer pescado, pavo o pollo al horno. Los postres típicos son los polvorones, turrones o roscos. Además, por supuesto, del vino dulce, hecho a base de zumo de pasas.

Aragón

El plato más demandado en el noreste peninsular es el cardo con almendras o también con bacalao, los cardos con oreja y el rabo de cerdo y, por supuestísimo, el asado de ternasco, en recetas varias. Lo más común, asado como paletilla y jarretes. Lombarda y besugo al horno son otras opciones, seguidas del turrón y los guirlaches, claro. Garnachas no nos van a faltar, ni blancas ni tintas.

Asturias

Los asturianos comen muy bien y beben buenas sidras. No pasan una Navidad sin comer tortos de maíz con queso cabrales y bollos preñaos, que pueden ser de chorizo o de queso azul. Casi por norma comen fabada, mariscos y pescados del Cantábrico. De postre comen las casadiellas, el arroz con leche o los frixuelos.

Baleares

En estas islas se comen las sopas de galets rellenos o de la reina con flan salado de huevo. También rellenan pavos, capones, calamares o la típica lechona mallorquina de engorde natural. Riquísimo el sofrit pagès de Ibiza y Formentera, con cordero y pollo de corral, sobrasada, butifarra y alcachofas. Todo ello regados con licores típicos como las hierbas ibicencas o los vinos isleños. Los postres suelen ser los turrones.

Canarias

Además de sus bebidas típicas, como el ronmiel o los vinos de sus terruños volcánicos. En las 'islas afortunadas' tienen la tradición de comer la pata de cochino asada, el baifo, las papas arrugadas y el gofio escaldado. También la carne de cabra y conejo, las lapas con mojo verde, la ropavieja, la vieja a la plancha o al horno y el queso asado con mojo. Para terminar las comidas, suelen comer de postre truchas (empanadillas de cabello de ángel o batata), leche asada, quesadillas o mantecados.

Cantabria

No faltan los caracoles en diferentes elaboraciones, la sopa de pescado, el besugo o algún otro pescado del Cantábrico al horno y algo de marisco. Además de algún cordero lechal por proximidad a Castilla y León y, para acabar, torrijas, sí o sí. Aquí también tienen sidra autóctona, por cierto.

Castilla La Mancha

Las berenjenas de Almagro y las aceitunas partidas con un vermut de la tierra, antes de los garbanzos torraos. Son muy tradicionales platos como el atascaburras con migas de bacalao, las migas ruleras, el ajo matadero o morteruelo. También las perdices en escabeche o las judías con perdiz y el pollo en pepitoria empaparán al zurracapote, que es una bebida preparada con destilados hinojo, anís, fruta, etc.

Dejan espacio para el postre, momento en el que suelen disfrutar de los mazapanes de Toledo, de las hojuelas de la Sierra de Alcaraz, los suspiros y las peladillas.

Castilla León

En las meses castellano-leonesas no falta el cochinillo ni el lechazo. El rape, la merluza o los langostinos van seguidos de la granada o la macedonia de postre. Así como de dulces como el mazapán con piñones, las peladillas, polvorones de Tordesillas, turrón y orejones. Ribera del Duero, Toro, Rueda y Bierzo son los vinos más conocidos.

Cataluña

Los catalanes brindan con cava de la tierra. Mientras que, las comidas familiares están acompañadas de la sopa de galets (pasta con carne) y carn d’olla (con garbanzos, verdura, butifarra, albondigones), los canelones de carne y el gall d'indi o pavo relleno estofado.

Ceuta y Melilla

Por su situación geográfica suelen comer buenos pescados y mariscos como el centollo, el pulpo o el atún. Pero también disfrutan de platos con influencias árabes, como el pollo moruno o los caracoles al estilo ceutí. De postre no les falta las pastelas de hojaldre relleno marroquí, los troncos de navidad y los barrachuelos.

Euskadi

No se olvidan de la sidra vasca o txacolí para empapar. En Nochebuena en Euskadi se suele comer pastel de kabratxo, sopa de pescado y cardo con almendras. El día de Navidad cordero, aunque también pescado o marisco como el centollo. En Gipuzkoa toman (o tomaban) intxaursalsa, una crema de nueces y, para la sobremesa, tejas de Tolosa, turrones de Gorrotxategi y de Goya.

Extremadura

Los platos más tradicionales extremeños utilizan el pavo y el besugo de diferentes formas. Otro de los protagonistas es el cerdo ibérico. Lo pueden servir como solomillos rellenos o guisos con cerdo.

Ahora recurren mucho al jamón, el marisco y la carne, sobre todo la de caza como ciervo o corzo de todas clases hasta patés. No se puede concebir una comida en Extremadura sin sus quesos, especialmente sus tortas, con vinos de la Ribera del Guadiana, claro. Y las garrapiñadas y almendrillas también son famosas.

Galicia

Los habituales en las mesas gallegas son los centollo, las vieiras y las almejas. Tampoco escatiman en bacalao, que lo hacen cocido con coliflor y ajada. Cocinan otros pescados al horno y cabritos o cochinillos estofados.

El capón de Villalba, gallo o pollo de corral suelen servirse rellenos y acompañado de compota de manzana o puré de patatas. Otro esencial es el lacón con grelos y, de postres, la sopa de almendra, torrijas en almíbar, filloas, tarta de Santiago y roscón de reyes. Todo marinado con godellos, albariños, ribeiros y mencías.

La Rioja

Esta región tiene grandes influencias de las áreas colindantes, de modo que lo más típico es el cardo con bechamel y almendras, pero también se suele preparar cordero o cabrito asado, bacalao a la riojana y besugo al horno. De postre, además del turrón y los polvorones, compota, macedonia, almendras garrapiñadas caseras y mazapán de Soto. Vinos de la tierra, pacharán y licor de Valvanera.

Madrid

Aunque cualquier día te puedes comer un buen bocadillo de calamares o un plato de callos, para citas más especiales como la Navidad se suele comer cordero lechal, pollo asado, mariscos, pescados variados como el besugo al horno. Para el postre se reserva los turrones, bombones y mantecados.

Murcia

Cocido de pava con albóndigas de carne y caldo para abrir boca. También se come pierna de cordero o cabrito, cabeza de cordero. De postre tortas de Pascua, tortas de recao o de conde, mazapanes de Moratalla y pastelillos de cabello de ángel.

Navarra

En Navarra suelen comer el cardo, las borrajas, las alcachofas con jamón o con almendras. Tampoco se resisten al bacalao, cerdo o cordero asados. Son también amantes del pollo al chilindrón. Los típicos frutos secos como los orejones, ciruelas para postre y sus rosados navarros, tanto en vino como en espumoso.

Comunidad Valenciana

Los valencianos son unos apasionados de la paella y del cocido con pilotes de Nadal. Se dejan seducir también por las gambas, el esgarraet de cebolla, pimientos y bacalao y todo tipo de carnes al horno. 

Para beber reservan la uva bobal o moscatel de Alejandría de Alicante. Teniendo allí los turrones de Jijona, no es de extrañar que los disfruten en sus postres, además de las pilotes y la mistela.