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La transformación del mercado laboral en esta década se caracteriza por la digitalización, el envejecimiento de la población y la transición medioambiental. Estos factores impactarán tanto en la creación de empleos altamente cualificados como en la obsolescencia de ocupaciones tradicionales.
Según un estudio de Randstad Research y la Universidad CEU San Pablo, se prevé la creación de 821.000 empleos para trabajadores cualificados en los próximos años.
La digitalización y el envejecimiento: ¿Qué empleos serán reemplazados en un futuro cercano?
La digitalización ha dado lugar a la demanda de perfiles profesionales en áreas como Internet de las cosas, ciberseguridad, Inteligencia Artificial (IA) y Big Data.
La robótica, el comercio electrónico y las redes sociales también experimentan un incremento en la demanda de empleo. Estos cambios no solo afectan directamente a estas ocupaciones, sino que también generan empleos indirectos en otros sectores.
No obstante, la digitalización también implica la obsolescencia de empleos al automatizar tareas que solían realizar personas. Sectores como la hostelería, la industria manufacturera, el transporte, la agricultura, el comercio minorista, los servicios financieros, la construcción y la minería son los más susceptibles a estos cambios. Por ejemplo, contables, auditores, técnicos de nóminas y analistas financieros podrían ver reducida su demanda laboral.
Además de la digitalización, la transición medioambiental también tiene un impacto en el mercado laboral
La necesidad de una economía más sostenible y respetuosa con el medio ambiente impulsa la demanda de empleos en áreas como la eficiencia energética, las energías renovables, la movilidad sostenible y la gestión de recursos.
Por otro lado, sectores contaminantes pueden experimentar una reducción en las oportunidades de empleo, lo que requerirá una reconversión laboral hacia ocupaciones de menor impacto medioambiental.
La pandemia también influye en la demanda de empleo
Profesiones relacionadas con el campo de la salud, como Medicina y Enfermería, experimentan un aumento en la demanda debido a la necesidad de atención sanitaria. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la titulación universitaria no siempre garantiza un perfil profesional completo, ya que a menudo se requiere formación complementaria especializada o experiencia laboral adicional.
A pesar de la alta empleabilidad de los nuevos perfiles asociados a la digitalización, se espera que la mayoría de los empleos creados en los próximos años estén en sectores diferentes al digital. Por lo tanto, es esencial adaptarse a estos cambios y adquirir habilidades actualizadas para mantenerse competitivo en el mercado laboral en constante evolución. Estar dispuesto a reciclarse profesionalmente y estar abierto a oportunidades emergentes son aspectos clave para aprovechar las nuevas tendencias del mercado laboral.
En conclusión, la transformación del mercado laboral impulsada por la digitalización, el envejecimiento de la población y la transición medioambiental está redefiniendo las demandas de empleo. Si bien algunos empleos tradicionales se vuelven obsoletos, surgen nuevas oportunidades en sectores emergentes. Adaptarse a estos cambios y adquirir las habilidades necesarias son aspectos esenciales para asegurar una trayectoria laboral exitosa en este entorno dinámico.
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