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A medida que pasan los años son más las personas que optan por pagar con la tarjeta o a través del famoso bizum. Sin embargo, hay muchas otras que siguen acudiendo al cajero automático a por dinero para pagar en efectivo, aunque muchas no saben la cantidad exacta.
Un límite de dinero para imponer el fraude fiscal
En la actualidad el dinero físico está desapareciendo, ya que la mayoría de la población opta por recurrir a la tarjeta de crédito o al ya famoso bizum. A pesar de ello, son muchos los que deciden mantener los billetes físicos, por lo que acuden de forma cotidiana al cajero automático.
Sin embargo, el cajero automático establece un límite de dinero para evitar el fraude fiscal. A pesar de que no existe un límite fijo para las distintas entidades bancarias debido a que cada una fija su propio límite, sí que se establece una cifra media alrededor de los 600 euros.
La Agencia Tributaria, actualmente, permite que se retiren, como máximo 3.000 euros de un cajero automático sin ningún tipo de justificación. En caso de que se necesite sacar una cantidad mayor, la persona estará obligada a pedir un justificante de la oficina bancaria donde se notifica a la Agencia Tributaria y al Banco de España.
En el caso de que el movimiento sea, al contrario, es decir, recibir un ingreso de 3.000 euros a la cuenta bancaria sin ser un ingreso puntual o periódico, puede levantar todas las alarmas. Lo mismo pasaría si se tratas de billetes de 500 euros, ya que no son muy demandados.
También es importante saber el funcionamiento del cajero automático a la hora de sacar dinero. Es importante saber que se renueva todos los días a las 00:00 horas. Esto quiere decir que debes esperar hasta el día siguiente para volver a retirar dinero.
A pesar de las grandes cantidades de dinero, lo más común en cualquier cajero es sacar la cantidad de 600 euros, independientemente del cajero o entidad bancaria.
¿Qué hago si no recibo los billetes correspondientes del cajero?
A pesar de que los cajeros automáticos están muy digitalizados, hay ocasiones donde los billetes pueden quedarse dentro. Esto puede ser problema técnico del cajero, pero otras veces puede deberse a una manipulación.
La estafa más común es “cash trapping”, es decir, una trampa de dinero en efectivo cuando el cajero no proporciona la cantidad solicitada, pero sí que se descuenta de la cuenta corriente. Esta operación se entra en el bloqueo del dispensador en efectivo, ya sea un elemento en la parte externa del cajero o en su interior.
Si alguna vez te pasa eso, es muy importante que te mantengas en el lugar y compruebes si la máquina está manipulada o no. En cualquiera de los casos, ponte en contacto con tu banco para comunicarlo de inmediato y buscar una solución.
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