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Con el clima político actual cuesta mucho creer que los diferentes partidos políticos, sobre todo si se trata de rojos y azules, puedan llegar a ponerse de acuerdo en algo. Sin embargo, es posible que haya un punto de encuentro muy útil entorno a la discapacidad y las necesidades políticas que requiere para que se mantenga y se trabaje en el respecto a los derechos de las personas con diversidad funcional de forma cada vez más amplia.
Así pues, por extraño que parezca, partidos como PSOE, Sumar y el PP han trabajado juntos en una propuesta emitida recientemente al Congreso de los Diputados para crear una comisión permanente no legislativa de Políticas Integrales de la Discapacidad. Esta petición ha ido acompañada de otras tantas, pero sería la primera vez que los derechos de las personas con diversidad funcional se debaten de forma individual, dándoles el protagonismo que requieren.
Una comisión permanente y exclusiva para la discapacidad
Estos cambios llegan con la reciente formación de un nuevo Gobierno, que se ha hecho esperar desde finales de julio, en el que volverá a verse la coalición entre Sumar y PSOE, como la que hemos tenido hace cuatro años, y con un PP bastante fuerte por su número de representantes en el Congreso. Por este motivo, que estos tres partidos se hayan puesto de acuerdo en que las políticas sobre discapacidad son un tema relevante, puede asegurar que se trabaje en ellas sin la lluvia de dardos actual.
Así pues, es muy posible que la discapacidad pronto cuente con su propia comisión permanente para el debate y las propuestas de mejoras para la vida de estas personas. En la legislatura anterior, estas competencias residían dentro de la comisión que se encargaba de los Derechos Sociales. Ahora, al ser independiente, se podrán tratar con más detalles todas aquellas necesidades de este colectivo y se espera además que pueda hacerse a través del consenso.
Las comisiones permanentes no legislativas no tienen poder para emitir leyes o propuestas de ley, pero sí para llevar a cabo un trabajo de investigación y atención a los asuntos de las personas con discapacidad. Por ejemplo, pueden proponer investigaciones sociológicas de todo tipo sobre el colectivo, plantear a debate las mejoras políticas en ciertos ámbitos, como el sanitario, el deportivo o el de empleo.
También pueden atender de forma más personalizada las solicitudes de asociaciones y organizaciones que trabajen por la mejora de la calidad de vida de estas personas.
Otras solicitudes
Este acercamiento político ha ido más allá de la discapacidad, ya que también han solicitado el mantenimiento o creación de otras cuatro comisiones permanentes: la de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo; la comisión de seguimiento y evaluación del Pacto contra la Violencia de Género; la de seguridad vial, y otra para la auditoría de la calidad democrática, la lucha contra la corrupción y las reformas Institucionales y legales.
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