Algunas energías renovables causan la pérdida de la biodiversidad

España necesita de las energías renovables para poder cumplir el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), pero las prisas nunca fueron buenas, y esto puede dar lugar a daños en la biodiversidad irreversibles.

Así lo alertan 23 científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CISC) y de varias universidades. El estudio ha sido publicado en la revista Science, y aunque están a favor de este tipo de energía, opinan que los nuevos proyectos afectarán “cientos de miles de hectáreas y no hay forma de compensar la enorme cantidad de hábitats valiosos que podrían perderse”.

Es por esto que los científicos piden que, para llevar a cabo una correcta transición energética en valores de la naturaleza amenazados, se necesita una mejor planificación, acompañada de políticas que apueste por la eficiencia, el autoconsumo y el ahorro energético.

El 'boom' de las energías renovables puede causar estragos en la biodiversidad

Las extensiones de placas fotovoltaicas que ocupan zonas llanas pueden acabar repercutiendo de forma negativa a la viabilidad de poblaciones de aves esteparias, altamente amenazadas en España.

El sisón, las gangas, la alondra ricotí, el aguilucho cenizo o el cernícalo primilla han visto mermadas sus poblaciones en los últimos 15 años entre un 20 y un 50 %.

Al tener su hábitat en áreas no protegidas por la Red Natura 2000, estas especias no cuentan con "herramientas legales para blindarlas frente al avance de proyectos macroenergéticos", denuncian los científicos.

La mortalidad de las aves, en especial de buitres o murciélagos, que chocan con estos montajes de energías renovables, en esta caso, con las 20.000 turbinas de los "molinos" de España.

“Como mínimo” se estima que mueren al año 200.000 ejemplares de murciélagos y alrededor de un millar de buitres leonados por esta causa.

Y esto acaba dejando consecuencias demográficas en poblaciones amenazadas, como es el caso de los alimoches, que chocan con los aerogeneradores en Andalucía, y donde dicha especie está catalogada con la máxima figura de protección.

Además, desde el CSIC apuntan que cuando se detectan puntos críticos que afectan a las aves nunca se detienen las turbinas para frenar las muertes.

Algunos de estos proyectos de energías renovables, muchas empresas escogen suelos más baratos para construir sus infraestructuras. Terrenos marginales pero que pueden contener un alto valor ecológico, donde viven aves esteparias y rapaces que contienen las mayores poblaciones europeas o mundiales en España.

Y aunque los científicos consideran que las energías renovables son necesarias, opinan que su coexistencia con la biodiversidad necesita planificación cuidada y muy buenas prácticas en procesos de evaluación ambiental.

España tiene que ser cauta a la hora de cumplir los objetivos energéticos, estos no pueden cumplirse a costa de la salud de la biodiversidad

El estudio científico apunta que “se deberían construir el mínimo de plantas posibles en el campo y buscando terrenos que no tuvieran un alto valor ecológico, además de apostar por el autoconsumo aprovechando las cubiertas de los edificios de polígonos industriales, empresas, barrios…”.

Además, que algunas de las instalaciones de las energías renovables se instalen en áreas con especies mal protegidas sucede porque la información al respecto de dichas zonas no está ni actualizada ni disponible, por lo que se da luz verde sin más.

Asimismo, apuntan que los estudios de impacto ambiental de las infraestructuras de las energías renovables los financian empresas de energía, y cuentan con poca supervisión por parte de los Gobiernos.

Pero la investigación indica que el problema central es la prisa de España por cumplir objetivos, cosa que ha dado lugar a un proceso acelerado y desordenado que, tal y como apuntan, desborda a la Administración y los técnicos.

Los investigadores apuntan que existen permisos de acceso a la red eléctrica para proyectos de energías renovables que representan 121 gigavatios, que se añadirán a los 36 instalados. Cosa que muestra que se duplican los objetivos del borrador del PNIEC para 2021/2030.