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“La esclavitud del siglo XXI” es como se le llama a lo que todos conocemos como la trata de personas, una vulneración directa de los derechos humanos y que viene dada siglos atrás. Actualmente se siguen viendo casos de víctimas, sobre todo niñas y mujeres, aunque en otros ámbitos también se da un porcentaje en hombres. El Gobierno y Cáritas se comprometen a luchar contra el tráfico de personas en el campo sexual, laboral y tecnológico.
Naciones Unidas detectó 50.000 víctimas de distintos países
La trata sigue siendo un fenómeno preocupante que conlleva costes humanos, sociales y económicas. Naciones Unidas detectó del año 2016 a 2018 un total de 50.000 víctimas de trata en 148 países, sin contar los crímenes de carácter clandestino que se mantienen ocultos.
Entre 2017 y 2018, la Comisión Europea registró 14.000 casos.
El porcentaje de niños entre las víctimas de trata se ha triplicado en 15 años
Con el avance de las tecnologías y las redes sociales, se ha notado un incremento en cuanto a las víctimas de trata en menores, un porcentaje que se ha triplicado en 15 años. Las causas principales suelen ser una búsqueda de aceptación, atención o amistad.
Estos jóvenes son captados a través de dos tácticas de Internet: el “hunting”, donde el traficante persigue activamente a una víctima, y el “fishing”, mediante el cual los autores publican anuncios de trabajo y esperan a que las víctimas respondan. Esto ha llevado al abuso simultáneo por parte de muchos consumidores a través de la retrasmisión den directo de la explotación de traficantes.
El mayor porcentaje de trata recae sobre las niñas y mujeres
Entre los distintos fines de explotación, el tráfico de personas alcanza un 78 % en cuanto a niñas infantiles, las víctimas “engañadas para ejercer la prostitución”. En cuanto a las mujeres, siguen siendo las más damnificadas tanto a nivel nacional como europeo. Un 72 % suelen sufrir explotación sexual. La IOM ha reconocido que los hombres también pueden ser vulnerables en muchas formas de tráfico de personas.
En el Día Europeo contra la Trata, la comisaría insistió en la importancia de colaborar en el trabajo con biometría y las tecnologías de reconocimiento facial para facilitar la búsqueda de niños, ya que son los más vulnerables de llegar a otros países con pasaportes falsos e imágenes borrosas.
El Gobierno y Cáritas, unidos para luchar contra la trata
Cáritas también ha querido denunciar “la situación de extrema vulnerabilidad” en la que se encuentran estas víctimas de personas y reclama “medidas urgentes que permitan su identificación y garanticen su protección”.
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