Sin teletrabajo, un tercio de los españoles dejarían su trabajo

El 29 % de los trabajadores españoles estarían dispuestos a dejar su empleo si su empresa les obligase a pasar más tiempo en la oficina, mientras que el 46 % de los profesionales españoles también renunciarían a su trabajo si no les permitieran disfrutar de su vida personal.

Así lo muestra el “Informe Workmonitor” elaborado por Randstad a partir de 27.000 trabajadores de 34 países, entre ellos España, que muestra que desde la pandemia cada vez más personas prefieren el trabajo desde casa debido a la flexibilidad que ofrece.

Los españoles se adaptan al trabajo en casa

En concreto el 24 % de los encuestados españoles han realizado cambios en su vida como mudarse, para adaptarse al teletrabajo.

Asimismo, el 59 % de los trabajadores manifiestan que no aceptarían su empleo si este pudiera perjudicar a su equilibrio entre trabajo y vida personal. El 46 % dejaría su ocupación si le impidiera disfrutar de su vida plenamente.

El empleo en plataformas digitales cada es más común

Según Javier Martín, director de Talento de Randstad España “Las tendencias están cambiando y cada vez cobra más importancia el salario emocional. Las empresas tienen que reinventar su propuesta de valor a la hora de atraer el talento y adaptarse a las necesidades de las distintas generaciones que conviven en las empresas”.

Tal y como dijo Martín, “Es evidente que la pandemia supuso un cambio no solo en la manera de trabajar sino en la manera de ver el trabajo”. Por ello, destacó que “flexibilidad, conciliación y bienestar así como el alineamiento entre valores propios y los de la empresa han pasado a ser una prioridad en el mercado laboral. Las empresas deben ser conscientes de ello y adaptarse a estas nuevas prioridades”.

La alineación con los puntos de vista como factor decisivo para los trabajadores

Por lo que se refiere a los principios e ideales de cada persona, son también un argumento de peso a la hora de escoger un trabajo, ya que 37 % de los trabajadores no aceptaría un empleo si no estuviera de acuerdo con las perspectivas de la dirección. Es vital que los trabajadores compartan los mismos valores que la empresa, ya que así serán más felices, por lo que ofrecerán mayor productividad, estarán más comprometidos, y generarán más rentabilidad.

La formación continua de los empleados brinda una serie de beneficios en el trabajo contribuyendo a su crecimiento, a aumentar su productividad y conseguir el éxito profesional en el futuro. Así mismo es importante que las empresas ofrezcan oportunidades de desarrollo para que los trabajadores no se sientan estancados.

 “En resumen, se plantea un nuevo contexto en el que el salario emocional cada vez cobra una mayor importancia y la conciliación, la flexibilidad, el bienestar y el crecimiento profesional se han convertido en los elementos clave para atraer y retener el talento”, finaliza el informe de Randstad.