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El uso de la mascarilla en interiores hace una semana que dejó de ser obligatorio, pero a pesar de la retirada de esta medida, muchos son los que prefieren seguir usándola en esos espacios cerrados.
Para algunos, la retirada del decreto supuso una liberación, para otros, un 67 % según la encuesta realizada por el Instituto DYM, sigue siendo un completo de uso obligatorio.
Y es que, después de 700 días con esta restricción, parece que la mascarilla continua siendo complemento indispensable a la hora de entrar en espacios cerrados.
La mascarilla en interiores sigue viéndose en la gran mayoría de personas
La mascarilla en interiores sigue siendo una realidad en tiendas, gimnasios, centro comerciales, y otros lugares públicos cerrados.
Según el Instituto DYM, el 28 % se sitúa en las personas que solo la llevan donde la ley exige. Y el 2,7 % afirma usarlas por igual, y un 1,4 % no sabe no contesta.
Asimismo, para hacer mucho más curiosa esta encuesta, se ha clasificado a los entrevistados sobre el uso que hacen ahora de la mascarilla en interiores, y se acaba reflejando que los votantes de Unidas Podemos y Vox, son aquellos que menos usan esta protección cuando no es obligatoria, un porcentaje que representa el 60,6 % y el 61,9 %.
Un 70,2 % de los votantes de Ciudadanos, un 72,4 % de los de PSOE y el 77 % de los votantes del PP, si que continúan usando la mascarilla en interiores a pesar de la caída de la restricción.
Entre quienes manifiestan que solo se cubren nariz y boca cuando es obligatorio, el 37 % apoya al partido de Santiago Abascal; el 35,1 %, a la formación morada; el 24,2 % a los socialistas; el 23,5 %, al partido naranja, y el 19,5 %, a los populares.
Los resultados de la encuesta demuestran que son más lo que prefieren seguir usándola, frente a aquellos que la han desechado por completo de sus vidas.
Ya se vio al inicio de la retirada de la obligación del uso de dicha protección la reacción de la gente
El pasado 20 de abril, cuando se estrenó la medida que retiraba la obligación del uso de mascarilla en interiores ya dejó ver la reticencia de la gran mayoría a dejar de usarla.
Y es que desde primera hora de la mañana, en los andenes de metro, donde no es obligatorio llevarla puesta, solamente se podía ver dos o tres caras al descubierto.
Si se entraba a preguntar el porque de su uso, las respuestas acaban llegando al mismo punto: el respeto hacia quienes sí quieren seguir llevándolas.
Por otro lado, el uso de mascarilla en interiores es un engorro para muchos otros, pero son los mismos que dicen ponérsela ya que ven a una gran parte de la sociedad seguir con ella, y por no faltarles al respeto, se la vuelven a poner, aunque si fuera por ellos mismo, ya no la llevarían más.
Y tú, ¿sigues llevando la mascarilla?
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