Lectura fácil
En febrero de 2018, Ekai Lersundi se rindió a sus 16 años. Había solicitado un tratamiento hormonal que nunca llegó, batallaba infructuosamente para que se reconociera su verdadera identidad de género, y no pudo más: Lersundi se quitó la vida en su casa. “Fue muy triste. Sin embargo, escribió una carta de despedida esperanzadora y luminosa, intentando que con su drástica decisión se produjera un cambio en la sociedad. Puede que en aquel 2018 su realidad no formara parte del debate o de la agenda política, pero a mí me impulsó”, cuenta la cineasta Estibaliz Urresola, autora de ‘20.000 especies de abejas’.
El cine español sigue volando alto en 2023
Tal como publica RTVE, cuando se cumple un año del triunfo de Alcarràs, en la Berlinale, la competición por el Oso de Oro aplaude a 20.000 especies de abejas, la ópera prima de Estibaliz Urresola en la que firma un realista, delicado y emotivo registro de la infancia de una niña trans de ocho años y del proceso de asimilación de su entorno familiar.
Sinopsis. Ambientada en al País Vasco (español y francés) 20.000 especies de abejas acompaña a ‘Cocó’ (Sofía Otero) una niña de ocho años llamada Aitor al nacer pero que quiere ser llamada Rocío. Durante un verano con su abuela y su tía trata de entenderse, y, sobre todo, que las miradas que la rodean la entiendan.
El origen de 20.000 especies de abejas se remonta a 2016, cuando a Estibaliz Urresola le llamó la atención la noticia del suicidio de un joven de 2016 que buscaba un tratamiento hormonal. “Dejó una carta que me emocionó mucho porque, obviamente era muy triste, pero proyectaba esperanza hacia las generaciones que venían detrás, esperando que encontrasen un lugar más habitable y con más aceptación para niños trans en su situación”, recuerda la directora en una entrevista con RTVE.es.
En una coincidencia temporal, la película se estrenó en Berlín la misma semana que se apruebó la Ley Trans y 20.000 especies de abejas es una muestra más de que la ficciónl ayuda más a empatizar que 20.000 titulares y debates.
Lo real inspira '20.000 especies de abejas'
Urresola ahonda en la conexión con la identidad, el cuerpo y la naturaleza. A través de metáforas visuales y un cuidado guion que, con las vacaciones en el pueblo de una madre y sus niños como trasfondo, hilvana la búsqueda de la identidad de los miembros de la familia. Y, en ese camino, encontrarán aliados y adversarios, amigos y oponentes.
20.000 especies de abejas es un juego de espejos de las relaciones familiares, con una de las peleas maternofiliales más (fríamente) salvajes que recordamos y con uno de los personajes, la tía, más bello de los últimos tiempos, que podría representar perfectamente la sabiduría de la madre naturaleza.
Añadir nuevo comentario