Los enfermeros asumen la prescripción de Ibuprofeno y Paracetamol ante la fiebre

El Ministerio de Sanidad permite a los enfermeros recetar ibuprofeno y paracetamol para tratar la fiebre, ampliando sus funciones en la dispensación de medicamentos. La guía, publicada en el Boletín Oficial del Estado, orienta a los enfermeros en la indicación y autorización de tratamientos, ofreciendo pautas para su uso y ajuste.

Los enfermeros podrán recetar ibuprofeno y paracetamol para la fiebre

El Ministerio de Sanidad ha ampliado las responsabilidades de los enfermeros para recetar ibuprofeno y paracetamol y tratar la fiebre. La guía, recién publicada en el Boletín Oficial del Estado, proporciona pautas a los enfermeros sobre cómo indicar, usar y autorizar la dispensación de medicamentos, incluyendo el inicio, modificación, prórroga, suspensión o finalización del tratamiento.

Este documento, aprobado en octubre por la Comisión Permanente de Farmacia, es el sexto de su tipo y ha sido desarrollado en colaboración con el Consejo General de Enfermería y la Organización Médica Colegial. Anteriormente, el Ministerio había emitido guías para heridas, diabetes, quemaduras, ostomías y anticoagulantes orales.

El objetivo de estas guías, según se indica en el BOE, es ser una herramienta para mejorar los resultados de salud a través de una atención integral, segura, colaborativa y basada en la evidencia. Además, se busca garantizar la continuidad asistencial.

En relación con la nueva autorización, se han considerado la incidencia y prevalencia de las situaciones clínicas abordadas, la seguridad clínica en la aplicación de las guías y el valor añadido de un abordaje precoz, equitativo y colaborativo de los síntomas y situaciones de salud.

Este desarrollo se enmarca en el Real Decreto de 2015 y sus modificaciones de 2018, que regulan la indicación y dispensación de medicamentos por parte de los enfermeros.

Un solo objetivo: Mejorar los beneficios y obtener buenos diagnósticos

Considerando la importancia clínica de identificar la causa de la fiebre, la decisión de usar antitérmicos implica reconocer que prolongarla no aporta beneficios diagnósticos. En pacientes sin contraindicaciones, el uso de antitérmicos permite controlar el síntoma, prevenir complicaciones y mejorar la comodidad del paciente.

Los enfermeros siguen rutinariamente el tratamiento con antitérmicos en Atención Primaria y en entornos hospitalarios. También desempeñan un papel vital en educar a la población sobre la autogestión de síntomas leves, promoviendo la salud y hábitos de vida saludables.

La intervención de enfermería, que ahora incluye la indicación de antitérmicos, forma parte integral del abordaje, proceso diagnóstico y tratamiento global de las personas con fiebre. Su objetivo es controlar el síntoma, mejorar la comodidad del paciente y reducir las complicaciones asociadas. Es importante destacar que esta acción enfermera se limita al manejo farmacológico de la fiebre y no excluye la evaluación médica y la aplicación de medidas según la situación clínica del paciente.

Guía y normativa actualizada

Por tanto, el documento sirve como referencia clave que establece el marco para que los enfermeros lleven a cabo acciones relacionadas con la medicación, en el contexto de un seguimiento colaborativo durante tratamientos individualizados. Este enfoque se realiza mediante el uso de protocolos y guías acordadas de manera multidisciplinaria.

Las acciones descritas en esta guía contribuyen directamente al logro del objetivo terapéutico de mejorar o resolver el síntoma de la fiebre, al mismo tiempo que se trabaja para prevenir posibles complicaciones en el futuro, según lo destacado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Cabe señalar que esta guía se inscribe en el marco de desarrollo establecido por el Real Decreto (RD) 954/2015 del 23 de octubre, que regula la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios por parte de los enfermeros. Además, se toman en cuenta las modificaciones realizadas por el RD 1302/2018 del 22 de octubre, fortaleciendo así el marco normativo que respalda estas prácticas.