El hielo marino en la Tierra alcanzó su extensión más baja en el pasado mes de julio desde que comenzaron los registros por satélite en 1979, con un promedio de 21,67 millones de kilómetros cuadrados, según la agencia estadounidense NOAA.
Un estudio realizado por investigadores de varias universidades muestra que el Protocolo de Montreal, un acuerdo global de 1987 para proteger la capa de ozono, está retrasando el primer verano ártico sin hielo hasta 15 años.
La pérdida de hielo marino en el Ártico acarrea consecuencias no deseadas como la alteración de los patrones climáticos globales, entre muchas otras muy serias.
Las cifras de hielo marino tanto en el Ártico como en la Antártida cada vez son más bajas. Los polos se derriten a causa del incremento del calentamiento global.