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Una investigación realizada por el grupo de investigación FoodLab de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y la Agencia de Salud Pública de Cataluña ha revelado que los niños en Cataluña consumen meriendas mayormente poco saludables, llenas de azúcares y alimentos ultraprocesados. Solo el 22 % de las meriendas analizadas cumple con las recomendaciones de las autoridades sanitarias. Estos resultados coinciden con estudios similares en otras regiones de España y países desarrollados.
Una investigación revela cómo son las meriendas en las escuelas actuales
Una investigación realizada por el grupo de investigación FoodLab de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), en colaboración con la Agencia de Salud Pública de Cataluña, ha revelado que las meriendas que consumen los escolares en Cataluña son en su mayoría poco saludables.
Los resultados muestran que el 78 % de las meriendas contienen altos niveles de azúcar y productos ultraprocesados, y solo el 22 % cumple con las recomendaciones nutricionales establecidas por las autoridades sanitarias.
Un 42 % de las meriendas son bocadillos y bollería
La investigación, publicada en la revista 'Nutrients', analizó 2.163 meriendas proporcionadas por 734 familias con niños de entre 3 y 12 años. Se observó que el 42 % de estas meriendas consistían en bocadillos, mientras que un 24 % incluía bollería industrial, un 14 % fruta, y el 6 % combinaba bollería con fruta. A medida que los niños crecen, la calidad nutricional de sus meriendas empeora, lo que preocupa a los expertos.
Otro tipo de investigación a nivel internacional corroboran los hallazgos sobre las meriendas escolares poco saludables. Un estudio realizado en 2018 en Australia, China, México y Estados Unidos reveló que, aunque existen variaciones en la frecuencia de consumo y el aporte nutricional, en general se observa un alto contenido de azúcares añadidos y grasas saturadas en las meriendas de los niños de 4 a 13 años. Esto refleja una tendencia preocupante que se extiende más allá de las fronteras de Cataluña.
Una advertencia sobre la obesidad infantil y el sobrepeso
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estado advirtiendo sobre el creciente problema del sobrepeso y la obesidad infantil a nivel global. En 2022, se estimó que más de 390 millones de niños y adolescentes de entre 5 y 19 años y 37 millones de menores de 5 años sufrían de sobrepeso.
Este aumento es alarmante, ya que el sobrepeso en la infancia se asocia con un riesgo incrementado de desarrollar enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2 y afecciones cardiovasculares, que pueden aparecer en etapas tempranas de la vida.
Además de los problemas de salud física, el sobrepeso en la infancia puede llevar a consecuencias psicosociales negativas, afectando la autoestima, las relaciones sociales y el rendimiento escolar. La OMS también ha destacado que estas condiciones pueden influir en la calidad de vida de los niños, creando un ciclo difícil de romper que afecta su bienestar general.
Ante esta situación, se vuelve esencial implementar estrategias efectivas que fomenten hábitos alimenticios saludables desde la infancia. Esto incluye educar a padres y niños sobre la importancia de una alimentación equilibrada y la elección de meriendas nutritivas.
Así, la colaboración entre instituciones educativas, sanitarias y familias es clave para abordar este desafío y garantizar un futuro más saludable para las nuevas generaciones.
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