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París, 17 ene (EFE).- Alstom facturó 5.517 millones de euros en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, que termina el 31 de marzo, una progresión del 6 % respecto al mismo periodo un año antes, en línea con los objetivos del grupo industrial francés, que está en pleno proceso de toma de control por el alemán Siemens.
Entre octubre y diciembre, el volumen de negocios subió un 6 % en datos brutos (un 8 % en comparables) hasta 1.761 millones de euros, señaló Alstom en un comunicado.
Esto procede, principalmente, del avance del proyecto del sistema del metro de Riad, en Arabia Saudí, de la entrega de trenes de alta velocidad (TGV) y regionales en Francia y de la ejecución de un contrato de mantenimiento en el Reino Unido.
Los pedidos, por su parte, sufrieron entre marzo y diciembre del pasado año un retroceso del 33 % en cifras absolutas (del 32 % en comparables) respecto al mismo periodo de 2016, con 4.853 millones de euros.
Ese retroceso del monto de los nuevos contratos en esos nueve meses se produjo pese a que en el último trimestre de 2017 subieron hasta 1.683 millones de euros, frente a los 1.023 millones en esos tres mismos meses del año anterior.
Entre octubre y diciembre, la compañía francesa logró, en particular, pedidos para 100 trenes del proyecto PRASA en Sudáfrica, trenes Pendolino con el mantenimiento asociado para NTV en Italia y trenes regionales en Francia.
La compañía confirmó sus objetivos financieros para 2020, lo que significa que espera un "crecimiento orgánico" del 5 % anual y un margen de explotación ajustado en torno al 7 % ese año.
A partir de 2020, Alstom confía en convertir en torno al 100 % de su resultado neto en flujo de caja libre.
El presidente, Henri Poupart-Lafarge, también adelantó que la aprobación de la transacción para la fusión con Siemens se aprobará en la asamblea general de accionistas que debería celebrarse en julio, después de la firma de los documentos contractuales.
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