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Berlín, 7 feb (EFE).- La renegociación de la Política Agraria Común (PAC) en la Unión Europea y la creciente competencia de América Latina y Asia en el mercado continental son dos de las mayores preocupaciones del sector agrícola español, que se congrega estos días en Berlín con motivo de la feria Fruit Logistica.
Unas 380 empresas españolas participan en esta cita clave del sector, que sirve desde hoy y hasta el viernes de escaparate de productos y tecnologías, pero también de plaza donde reforzar contactos y ampliar mercados, y de escenario de debate de los retos actuales.
El presidente de la Comunitat Valenciana, Ximo Puig, que acudió a la feria con una expedición de cerca de cien empresas, reconoció que el campo valenciano se enfrenta a un contexto de "creciente competitividad", pero afirmó estar a favor de los mercados abiertos.
No obstante, subrayó que es necesario "competir en igualdad de oportunidades", que "las reglas de juego sean iguales para todos", tanto en el ámbito fitosanitario como en las condiciones sociales.
Para mejorar la competitividad de los productos valencianos, Puig agregó que es "fundamental" que se complete cuanto antes el Corredor Mediterráneo, una vía de 3.500 kilómetros que unirá Andalucía, Murcia, Comunitat Valenciana y Cataluña con Europa.
"Si el Corredor Mediterráneo fuera una realidad rápidamente, tendríamos una mayor accesibilidad y un mejor coste logístico. Para nosotros el Corredor Mediterráneo es una urgencia desde el punto de vista de la exportación valenciana de todos los sectores, pero muy especialmente del agrario", concluyó.
El consejero de Agricultura de Murcia, Francisco Jódar, que se encuentra en la Fruit Logistica con 73 empresas de la región, agregó a este respecto en declaraciones a Efe que la competencia es "feroz" ya que "los procedimientos logísticos son cada vez más perfectos y la tecnología aplicada también".
Joaquín Olona, consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad de Aragón, que encabeza una delegación con 58 compañías, apostó en una entrevista con Efe por asumir el incremento de la competencia como una "realidad" y "no como un problema".
Con respecto a la PAC, que se va a empezar a negociar para los nuevos presupuestos europeos, Puig asumió que "inevitablemente" va a haber "una disminución del presupuesto" común para ayudas al campo debido a la salida de Reino Unido de la UE: "El 'brexit' tiene algunos condicionantes negativos".
Sin embargo, agregó, la principal preocupación del Gobierno valenciano es que la PAC adopte una nueva perspectiva en la que se prevean más ayudas a la agricultura mediterránea, pese a ser productiva, cuando hasta ahora se ha promovido más a la continental.
"Debe cambiar absolutamente de perspectiva. La nueva PAC no puede estar anclada a los viejos esquemas de la vieja PAC, muy continentalista y poco mediterránea", afirmó.
Jódar, por su parte, reconoció su "preocupación" con respecto a las ayudas de la nueva PAC por su posible recorte en relación a la marcha de Reino Unido y por la reforma del sistema de reparto, que desea que implique menos burocracia.
En esta misma línea, Olona consideró que, aunque el volumen de la PAC es importante, es más relevante la puesta en marcha de un nuevo sistema de reparto donde prime la justicia y la eficacia.
"Me preocupa que se produzca una reducción del presupuesto. Pero me importa mucho más que las ayudas de la PAC sean más justas y mucho más eficaces", indicó.
En su opinión, las subvenciones deben llegar "a quien lo necesita", a los productores cuya renta es más dependiente de la actividad agrícola.
"No debemos perder ni un euro. Pero de poco sirve tener euros si los aplicamos de forma ineficaz y de manera poco justa", agregó Olona.
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