Los mamíferos acaban sufriendo un grave estrés a causa de la deforestación. Así lo corrobora un grupo de investigadores que ha estudiado a un grupo de marsupiales en áreas deforestadas del Bosque Atlántico, ubicado en América del Sur.
Se han cerrados las reservas y parque naturales del Congo, hogar de los gorilas de montaña, para evitar que se contagien con el coronavirus, enfermedad letal para ellos.