04/03/2020 - 15:27
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La Comisión 8M, organizadora de la protesta del Día Internacional de la Mujer, acaba de publicar su argumentario. Se trata de un extenso documento que recoge y explica las reivindicaciones de este año. Todas quedan agrupadas en cuatro ejes: las violencias, los cuerpos, las fronteras y la economía.
Dicho argumentario recoge las reclamaciones que vienen haciéndose desde la primera huelga feminista, el Paro Internacional de Mujeres de 2017. La movilización de este año en Madrid se ha bautizado como 'Revuelta Feminista'.
La Comisión 8M descarta una huelga laboral
En cuanto a la posibilidad de llevar a cabo un día de huelga laboral, la Comisión 8M incide en que todavía es “más importante” el proceso llevado a cabo entre “feministas de todas las realidades” para llegar a este día. Por ello, queda descartada una convocatoria de huelga para este año.
“Nuestras vidas siguen marcadas por las desigualdades, por las violencias machistas, por la precariedad, por la cisheteronorma, por procesos de exclusión derivados de nuestros empleos, por la expulsión de nuestras viviendas, por el racismo y la no corresponsabilidad ni de los hombres ni del Estado en los trabajos de cuidados”, suscriben como queja.
“Queremos ocupar el espacio público, reapropiarnos de la decisión sobre nuestro cuerpo y nuestra vida, reafirmar la fuerza política de las mujeres, bolleras y trans y preservar el planeta en el que vivimos”, afirman.
La violencia machista
“Más de 1.560 mujeres han sido asesinadas por violencia machista en los últimos 14 años. Muchos de estos casos ni siquiera están contemplados en la Ley de Violencia de Género”, pone de manifiesto el documento. “Miles de mujeres, en toda nuestra diversidad, sufrimos malos tratos por parte de nuestras parejas o exparejas que siguen viéndonos como objetos en lugar de sujetos”, denuncian
Con el fin de combatir esta lacra que sufren miles de mujeres, la Comisión 8M pide que se contemplen las diferentes causas y todos los tipos de violencias machistas. Así como una educación afectivo-sexual contra los tópicos del “amor romántico y las masculinidades violentas”.
En la misma línea, solicitan priorizar en los casos con menores de por medio y que “no se otorguen custodias compartidas” a los padres maltratadores.
Legislación "insuficiente" frente a la violencia
De la misma forma, este documento de la Comisión 8M lanza un dardo contra “la legislación vigente” que consideran “insuficiente” en todo su conjunto. Así, piden más recursos para atajar la violencias machista por la vía judicial.
Exigen que “el personal judicial, policial y de servicios sociales reciba de manera continuada y obligatoria formación feminista, sobre diversidad cultural y migración, sobre diversidad sexual, identidad y/o expresión de género”.
En relación a las mujeres migrantes, piden que el Estado asuma su responsabilidad contra la trata y que las víctimas “no acaben en Centros de Internamiento de Extranjeros” y se garantice su máxima protección.
Por otro lado, las personas trans exigen que acabe “la patologización” que sufren en el sistema sanitario y piden su igualdad y el amparo legal. “No tenemos disforia ni incongruencia de género. Queremos ser libres de ser quienes somos”, se subraya en el documento de la comisión.
Del mismo modo, para las personas con diversidad funcional piden que se reconozca su vulnerabilidad, especialmente cuando dependen de sus maltratadores.
Denuncian el control de "los cuerpos"
En este apartado el documento arremete contra “el control de la vida sexual y reproductiva” de “los cuerpos y las vidas de las mujeres, bolleras y trans”. Defiende “el derecho a decidir” para poder expresar “distintos proyectos de vida, nuevas formas de vivir la sexualidad, la maternidad, el cuerpo y la identidad y/o expresión de género”.
La Comisión 8M exige “derechos sexuales y reproductivos” para todas las mujeres, ya que actualmente, consideran que no son los mismos para las mujeres en función de su edad, condición migrante, identidad sexual, expresión de género o diversidad funcional.
Asimismo, piden que el aborto esté fuera del Código Penal, que se garantice su realización en los servicios públicos de salud y “se respete la autonomía de las mujeres de 16 y 17 años” para decidir en esta cuestión.
Fronteras
En este apartado se critican “las fronteras interiores”, que de acuerdo con su alegato están construidas “a través del colonialismo, el racismo, la islamofobia, el antigitanismo, la aporoforia y el capitalismo”. Así, consideran discriminatoria la 'ley de Extranjería'.
De la misma forma, exigen la derogación inmediata de “la Directiva Europea de Retorno, la Ley de Extranjería y todos los instrumentos jurídicos que impiden el derecho legítimo a migrar y a encontrar refugio en un territorio seguro”.
El eje económico
En este sentido, el argumentario arremete contra “la división sexual del trabajo”. “Los cuidados recaen fundamentalmente en las mujeres, porque se los ha adjudicado el sistema patriarcal” mientras que “invisibiliza” su labor.
Desde la Comisión 8M apoyan una economía feminista, basada “en la justicia social y ambiental”.
También, desde la Comisión 8M se exige la eliminación de “la brecha salarial de género” y que se alcancen “condición, promoción y remuneración dignas”, entre otras muchas peticiones más.
Reclaman también el aumento de inspecciones de trabajo en los sectores laborales feminizados y con altas tasas de contratación temporal, así como la articulación de políticas económicas de apoyo a los hogares monomarentales, la mayoría en riesgo de pobreza.
En el ámbito de la ecología también se destaca el papel de las mujeres en el campo y su contribución a las formas de vida sostenibles.
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