¿Qué es el micoplasma genital y cuáles son sus síntomas, causas y tratamiento? Información sobre una infección de transmisión sexual

El micoplasma genital es una infección de transmisión sexual que a menudo se pasa por alto. A pesar de ser una de las ETS más comunes, muchas personas no saben que existe y no conocen sus síntomas, causas y tratamiento.

Sin embargo, gracias a las campañas de concienciación que se han puesto en marcha en los últimos años, cada vez más personas están tomando medidas para prevenir y tratar esta infección.

El micoplasma genital: cómo son los síntomas de esta engermedad sexual

El micoplasma genital es una infección causada por la bacteria Mycoplasma genitalium, la cual parasita las células del tracto genital y respiratorio de primates. Aunque no es una ETS que reviste gran gravedad, puede producir enfermedades inflamatorias pélvicas en mujeres y epididimitis en hombres.

Se estima que entre un 1 y un 4 % de los hombres y entre un 1 y un 6,4 % de las mujeres padecen esta infección.

También se ha relacionado con infertilidad femenina y abortos espontáneos. Esta ETS se transmite por vía genital, anal u oral, e incluso por contacto con los genitales de una persona infectada.

Es importante el uso de métodos de barrera durante todas las prácticas sexuales para prevenir el contagio, y no solo durante la penetración. A pesar de ser una ETS común, no es ampliamente conocida por la población general debido a la falta de información y concienciación pública sobre ella.

Así son los principales síntomas del micoplasma

El micoplasma genital a menudo no causa síntomas, pero en algunos casos puede provocar uretritis en hombres y cervicitis en mujeres. En hombres, los síntomas incluyen molestias y escozor al orinar, picor en la uretra y secreción. A veces, también pueden presentarse balanitis e inflamación del prepucio.

En mujeres, los síntomas del micoplasma genital incluyen picor, aumento del flujo vaginal, molestias al orinar y dolor en el área pélvica. Si la enfermedad progresa hacia la enfermedad inflamatoria pélvica, es posible que se presente dolor intenso en el bajo vientre, fiebre y sangrado poco abundante.

Es importante mencionar que el micoplasma genital es una ETS que no reviste gran gravedad, pero es importante buscar atención médica en caso de presentar algún síntoma para recibir el tratamiento adecuado.

¿Existen tratamientos?

Es importante destacar que el tratamiento debe ser supervisado y prescrito por un profesional médico. Además, es fundamental que tanto la persona diagnosticada como su/s pareja/s sexual/es sean tratados para prevenir la reinfección y la propagación de la enfermedad.

En algunos casos, para tratar el micoplasma genital, puede ser necesario realizar pruebas de seguimiento para comprobar que la infección ha desaparecido por completo. Además, es fundamental tomar medidas preventivas, como el uso de preservativos, para evitar el contagio de ETS y mantener una buena higiene genital.