La meditación es una práctica muy recomendada por los profesionales de la salud. Sin embargo, existen algunos efectos contraproducentes o no es tan asequible para todas las personas.
Cuidar a un hijo supone una responsabilidad enorme, pero también debemos saber llevarlo con calma, sobre todo si estamos ante una persona con discapacidad. Para ello, recurrir a Mindfulness es una opción positiva.
La ansiedad y el estrés provocan desequilibrios en nuestra alimentación, como el hambre emocional, el sentir que queremos comer cuando no tenemos hambre.
A través de diferentes posturas, como chaturanga, eka padasana, padmasana, o malasana, se puede alinear el campo energético del cuerpo con la mente, para alcanzar un estado 100 % de consciencia.
A pesar de la antigüedad que tiene el yoga, desde hace solo unas décadas comenzó a introducirse en el mundo occidental, por lo que aún hay personas que desconocen un poco de qué trata.