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¿Qué sería de los museos sin los y las benefactoras/es que llenan sus paredes y sus pinacotecas de obras de arte? La respuesta es sencilla: No existirían. Por eso, el Museo del Prado ha preparado un recorrido especial para poner de relieve la figura de las principales benefactoras del museo. Mujeres que no solo tuvieron una especial sensibilidad y gusto por el arte, sino que hicieron un trabajo activo por divulgar grandes obras que se atesoran.
Por supuesto, la mayoría de estas mujeres, contaban con puestos de poder, entre ellas podemos encontrar a regentes, políticas o gobernadoras, que trabajaron por el impulso del arte y al cultura en espacios hasta ese momento ampliamente masculinizados. El Museo del Prado cuenta con un recorrido específico conocido como 'El Prado en Femenino', para dar visibilidad a la figura de la mujer en el arte, ahora también en su papel como benefactora.
El Museo del Prado no sería el que es sin ellas
El Museo del Prado ha incluido un recorrido específico en su itinerario 'El Prado en Femenino', para destacar obras que solo han podido estar colgados de sus paredes gracias a importantes coleccionistas y benefactoras del museo. Este recorrido, que incluyen diferentes salas entre la 1451 y la 1633, destaca 32 obras obras maestras, que ya son auténticos imprescindibles de la pinacoteca, como el 'Descendimiento' de Van der Weyden, uno de los cuadros más reconocidos y visitados.
Esta espectacular obra llegó al Museo del Prado de la mano de María de Hungría, hermana de Carlos V y reputada coleccionista de obras de arte. “María de Hungría es la figura más sagaz de su generación de la Casa de Austria, en lo que a la relación con las artes se refiere. Ella construyó la imagen imperial de Carlos V y tuvo esa capacidad de desinstrumentalizar el arte al servicio de los intereses políticos de su dinastía”, explica la profesora de Historia de Arte de la Universidad de Murcia Noelia García Pérez, directora científica del itinerario, en una entrevista para RTVE.
"Era de justicia reconocer que es el Museo del Prado donde mejor se puede estudiar el papel del patrocinio de las mujeres", ha señalado el director del Prado, Miguel Falomir, en rueda de prensa. Para Falomir, el trabajo de estas mujeres coleccionistas, ha supuesto que hoy en día el Prado se haya convertido en una "megapotencia. No creo que haya ningún otro museo donde las patronas hayan sido tan determinantes", en la configuración de sus colecciones, tanto por el número como por la calidad de las obras.
Isabel la Católica, una gran coleccionista
Isabel la Católica destaca por encima de cualquier otra, no solo en ser una gran benefactora, sino también en ejercer un potente trabajo de mecenazgo que fue imprescindible para que se produjesen importantes proyectos creativos que perviven hasta nuestros días. Esta reina, demostró una gran dedicación por proteger las artes y las ciencias y dejar un legado amplio de las mismas. Legado del que aún podemos disfrutar si nos damos un paseo por el Museo del Prado.
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