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No hay nada más subjetivo que el arte. No solo en el proceso de su creación, sino también en la forma en la que llegue a los demás y su apreciación. Sin embargo, existen algunas obras de arte, que por su calidad o relevancia histórica, se han ganado un puesto entre las mejor valoradas. De esta misma forma, hay otras que gozan de una gran popularidad, pero que cuando nos encontramos en vivo y en directo con ellas, dudamos sobre su excelencia.
Esto se debe principalmente a que muchas de estas obras de arte recibieron una publicidad excesiva o que su relevancia surja principalmente del aprecio de los habitantes del entorno en el que se encuentra, pero que para los visitantes no resulte "para tanto".
5 obras de arte que han estado sobrevaloradas
Como decimos, en el arte nunca hay nada escrito a fuego, pero sí existe un gran consenso sobre que estas 5 piezas artísticas que han sido sobrevaloradas, en muchos aspectos, y que pueden llegar a resultar decepcionantes cuando las tenemos delante:
El 'Manneken Pis' en Bruselas
Traducido al español como el 'Hombrecito que orina', se trata de una popular escultura de bronce que aparece en prácticamente todas las guías turísticas cuando vamos a visitar Bruselas. Sin embargo, su pequeño tamaño, un total de 65,5 centímetros, además de su lejanía a la vista, suele desilusionar bastante a los visitantes que se acercan a verla. Este es un ejemplo de esas obras de arte muy apreciadas por los lugareños, pero no tanto por los que vienen de fuera.
'La Gioconda' de Leonardo da Vinci
Probablemente se trate de una de las obras de arte más famosas en el mundo de la pintura. Sin embargo, para todo aquel que se acerque al Louvre para contemplarla, se llevará un tremendo chasco, y no solo porque la pieza es mucho más pequeña de lo que en un principio pueda parecer en su representación en películas o fotos, sino también por las medidas de seguridad que hay a su alrededor y la cantidad de gente que se agolpa para observarla.
Lo que ha hecho realmente popular a esta pieza, fue el convertirse en la protagonista de un robo al más puro estilo de guion de Hollywood y todo el merchandising que se generó a su alrededor.
'La Sirena' de Copenhague
Le pasa lo mismo que al Menneken de Bruselas. La Sirena de Copenhague es un símbolo de la ciudad y es el monumento más famoso de la capital de Dinamarca. Sin embargo, su tamaño, de 1,25 metros, puede llegar a decepcionar al que se acerca a verla. Sin embargo, es mejor no comentarlo con un danés.
'La Torre del Oro' de Sevilla
Sí, en España, aunque no queramos reconocerlo, también tenemos obras de arte que pueden llegar a decepcionar, aunque en este caso estamos hablando de arquitectura. Si bien es cierto que la relevancia de este edificio durante la época de la conquista de América fue muy elevada, hoy en día se ha quedado prácticamente absorbida por el desarrollo de la ciudad.
Con el nombre con el que se presenta y el cariño que le tienen muchos sevillanos, las expectativas suelen elevarse generando un chasco para el que se acerca a verla.
'Naranja, rojo, amarillo' de Mark Rothko
Podríamos decir que esta es una nueva categoría de obras de arte ampliamente sobrevaloradas. En este caso, se trata de un cuadro pintado por el estadounidense Mark Rothko, que se vendió por la friolera de 66,7 millones de euros. El cuadro cuenta con 3 tonalidades, como bien explica su título, dispuestos por el lienzo en líneas rectas. Otra vez volvemos al debate sobre los gustos, pero muchos expertos calificaron esta obra de absurdamente sobrevalorada.
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