En España, el 80% de los delitos de odio en 2022 se debieron a motivos como el racismo, la identidad sexual, la homosexualidad y el género. Se abrieron 198 diligencias.
Esta disminución en los delitos de odio contra personas con discapacidad es un avance significativo en la protección de sus derechos y la promoción de una sociedad más inclusiva.