Playas tranquilas para disfrutar del silencio y la soledad este verano

El verano es sinónimo de visita a las playas, seguido de un buen chapuzón, y una buena cerveza en el chiringuito, ¿no? Lo cierto es que muchos les encanta ese tipo de verano, lleno de jaleo, música y olor a espeto de sardinas malagueño, pero para gustos los colores...

Hay otro tipo de personas, y ya no solo 'otro tipo', sino que puede que hasta lo que nos ha gustado siempre, de repente cambie y nos apetezca otro tipo de verano, como es el relajado, sin mucho ruido ni mucha masificación.

Y puede parecer difícil encontrar playas en las que solo se escuche el ruido del mar, pero las hay, y no hace falta salir del territorio, por lo que toma nota.

Hay muchas personas que prefieren playas silenciosas, nada masificadas para encontrar un relax completo

Si solo buscas el sonido de la solas del mar, y poder poner tu toalla en la arena sin chocar con el vecino de al lado, te contamos que hay playas en España que te regalan ese chute de tranquilidad y relajación que necesitas.

La geografía española nos ofrece multitud de destinos tanto de interior como de costa, que merecen la pena visitar una y mil veces.

Por ello, hoy te dejamos esas playas silenciosas, donde el ruido de la naturaleza será tú único acompañante, donde poder desconectar totalmente es una realidad muy real.

• En Asturias, 'patria querida', los paisajes verdes y montañosos, húmedos y frescos nos sorprenderán con la Playa de La Gueirúa, en Cudillero. Se encuentra al occidente de la provincia, y cuenta con un entorno único que te embriagará y te hará olvidar mirar el reloj. Con tu toalla en la orilla, mojando tus pies, o dando un agradable paseo por la arena, esta es una de las ubicaciones que te devolverá la tranquilidad que tanto se necesita.

• Seguimos por la Costa Brava, aunque puedes pensar que es imposible encontrar playas tranquilas allí, pero así pasa con la Cala Sa Conca, de S'Agaró en Girona. Un paraíso que permanece escondido para los amantes de lo tranquilo. Guarda bien este secreto para que pueda seguir siendo un remanso de paz sin masificaciones. No es una zona virgen, por lo que podemos encontrarnos con un chiringuito, tranquilo, eso si, porque nunca viene mal tomarse algo a la orilla del mar.

• Bajamos hacia el sur, hasta llegar a Cartagena, en la Región de Murcia, donde nos encontramos con Cala Cerrada. Avisamos de antemano que su acceso es complicado, pues hemos de seguir un sendero que no cuenta con indicaciones, y podemos perdernos con facilidad, y además, el sol pega en esta zona de lo lindo, por lo que además no contamos con sombra alguna. Pero si te animas, llegarás hasta el mar, y un tono turquesa nos hará olvidar lo recorrido. Es una playa profunda, cosa que sorprender por estar situada en el Mediterráneo, además de que el fondo es una maravilla, así que no te olvides de llevarte tus gafas de buceo.

• Siguiendo para Motril, en Granada, nos podemos encontrar con playas como la de La Joya. Su nombre le hace honor, porque la Costa Tropical nos regala este paraje marino tan lleno de paz. El problema, como la anterior, es su acceso. Tendremos que bajar unos 200 escalones, y luego subirlos, pero te adelantamos que merece mucho la pena. Además, es una de las ubicaciones que cuenta con más arena que piedras, y eso destaca, más por la zona en la que se encuentra. Junto al túnel de Carchuna podemos encontrar su entrada. Es una playa que mezcla el nudismo y textiles, por lo que la intimidad y la tranquilidad están aseguradas.

• Situada cerca el casco urbano de Punta Umbría, nos topamos con Los Enebrales, en Huelva. Se trata de un paraje casi virgen y con un acceso sencillo. La costa de Huelva cuenta con riberas muy largas, que concentran mucha gente, y más durante los fines de semana, pero este rincón, que cuenta con un alto valor ecológico emana paz, y un ambiente totalmente diferente al otras zonas de la costa. Rodeado de bosque y arena, podrás relajarte totalmente.

Aún estás a tiempo, el verano continua, date un respiro y déjate embriagar por estas playas que nos regalan silencio y naturaleza.