Los precios del gas se mantendrán altos hasta 2025

El panorama del mercado del gas experimentó un cambio significativo a lo largo del año 2023, luego de un período marcado por las tensiones generadas por la invasión rusa a Ucrania. Esta situación llevó a una serie de fluctuaciones y ajustes en los precios del gas a nivel global. En diciembre de 2023, se observaron caídas sustanciales en los precios, con descensos interanuales del 68 % en Estados Unidos, del 54 % en Europa y del 39 % en Asia.

Estas cifras representaron un alivio en comparación con los picos alcanzados durante la crisis, pero aún dejaron los precios por encima de sus promedios históricos, especialmente en Europa y Asia.

Un informe proyecta los precios del gas y su aumento en los próximos años

Según el informe más reciente divulgado por Crédito y Caución, se proyecta que los precios del gas seguirán siendo elevados hasta mediados de la década, dado que los mercados mundiales continúan ajustándose a la pérdida del suministro ruso de gas hacia Europa a través de gasoductos.

Esta situación tendrá repercusiones en las regiones importadoras, aunque en Asia los efectos podrían ser mitigados debido a la indexación de muchos contratos a largo plazo con los precios del petróleo. Sin embargo, se anticipa que después de 2025, la mejora en las capacidades de transporte de gas natural licuado (GNL) reconfigurará el panorama del mercado del gas, lo que probablemente resultará en una reducción del precio en las principales regiones consumidoras.

Este cambio en la dinámica del mercado del gas no solo impactará en el precio, sino que también influirá en la geopolítica energética y en las estrategias de abastecimiento de los países. La diversificación de las fuentes de suministro y el desarrollo de infraestructuras de transporte más eficientes serán elementos clave en la adaptación a este nuevo escenario.

Asimismo, se espera que la competencia entre los principales productores de gas y los exportadores de GNL se intensifique, lo que podría beneficiar a los consumidores al ofrecerles opciones más variadas y competitivas.

Esto repercutirá en los precios de otras regiones importadoras, aunque los efectos en Asia se verán atenuados por la vinculación a los del petróleo de muchos contratos a largo plazo. Después de 2025, la mejora de capacidades de transporte del gas natural licuado reconfigurará el mercado del gas, reduciéndolos en las principales regiones.

La demanda de esta energía se reducirá en 2030

Crédito y Caución prevé que la demanda mundial de gas alcance su nivel máximo en los próximos años y empiece a disminuir en la segunda mitad de la década de 2020. De acuerdo con las proyecciones incluidas en el informe, en un escenario de referencia que tenga en cuenta solo los compromisos ya anunciados, la demanda mundial de gas se reducirá un 7 % en 2030 y un 42 % en 2050 frente a los niveles actuales.

En cuanto a las previsiones para Europa en este escenario de referencia sitúan la reducción en un 28 % para 2030. En un escenario de emisiones netas cero para 2050, el descenso global alcanzaría el 78 % en 2050.

La cuota del gas en el mix energético disminuirá a medida que las energías renovables ganen cuota de mercado, pero menos que la del petróleo. China, India y Oriente Medio seguirán siendo las principales fuentes de crecimiento de la demanda en las próximas décadas, mientras que Europa, Japón y Estados Unidos registrarán una contracción de la demanda.

Por el lado de la oferta, Estados Unidos es actualmente el mayor proveedor mundial de gas natural, seguido de Rusia e Irán. En el escenario de referencia, se espera que Rusia sea el mayor proveedor en 2050, seguido de Estados Unidos y Quatar.