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Madrid, 16 ene (EFE).- Uno de los cuatro consejeros del Tribunal de Cuentas elegidos a propuesta del PSOE, el barcelonés Lluís Armet i Coma, ha renunciado a su cargo, según ha revelado hoy el vicepresidente del Senado, Pedro Sanz.
Al tratarse de uno de los vocales elegidos por la Cámara Alta, esta institución tendrá ahora que poner en marcha el procedimiento para elegir a su sustituto, por una mayoría cualificada de tres quintos del pleno.
Armet era miembro del órgano fiscalizador desde julio de 2012, cuando un pacto entre el PP y el PSOE permitió desbloquear la renovación de los órganos constitucionales, acuerdo que además afectaba al Tribunal Constitucional, al Defensor del Pueblo y a la Junta Electoral Central.
En virtud de aquel pacto, el PP proponía a siete candidatos para ocupar el Tribunal de Cuentas, por cuatro del PSOE -Armet entre ellos- y uno más promovido conjuntamente por socialistas e IU.
Nacido en Barcelona en 1945, Lluís Armet, profesor de Derecho Mercantil y licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, ha ocupado muy diversos puestos técnicos y políticos, y cuenta con una larga experiencia en el Tribunal de Cuentas, ya que fue presidente de su sección de Fiscalización entre 2007 y 2012 y consejero del Departamento de Empresas Estatales entre 2001 y 2006.
Senador socialista entre 1995 y 2000 designado por el Parlament de Cataluña, anteriormente fue consejero de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat (1979 y 1980), diputado en el Parlament desde ese año y hasta 1987 y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona entre 1987 y 1995.
Su mandato expiraba en 2012, al igual que el de los demás consejeros elegidos por el Congreso y el Senado en julio de 2012.
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