El ronquido y el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño afectan al 30 % de los españoles

Son muchas las personas que sufren de ronquido, pero también existen otros problemas respiratorios más graves como el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS). Ambos conceptos se convierten en realidades para el 30 % de los españoles, quienes aseguran sufrirlo a diario.

Diferencia entre ronquido y Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño

Lo más importante a la hora de reconocer los distintos problemas respiratorios en la actualidad es saber diferenciar entre ronquido y Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño, dos alteraciones respiratorias que afectan hasta al 30 % de los españoles.

En primer lugar, el ronquido suele caracterizarse por ser muy ruidoso, ya que se produce una vibración de las estructuras que chocan entre sí en la zona de la orofaringe. Sin embargo, esta patología no suele tener consecuencias en cuanto a la saturación del oxígeno, algo que sí ocurre con otras enfermedades y alteraciones.

En segundo lugar, está el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS), este problema respiratorio es más peligroso que los simples ronquidos, ya que puede ocasionar problemas graves en nuestra salud. Su característica principal es la interrupción respiratoria superior al 90 %, durante al menos 10 segundos.

También existen otros conceptos como la hipopnea, donde la obstrucción se sitúa entre el 30 % y el 90 % durante los mismos 10 segundos. Aquí está la diferencia entre el ronquido y otras afecciones respiratorias.

El 30 % de los españoles afirma roncar

Si nos fijamos en los porcentajes de la población, el ronquido afecta al 30 % de los españoles, mientras que el SAOS en torno al 3 %, incrementándose este último en pacientes mayores de los 60 años.

En cuanto a la aparición de estas patologías, existen distintas causas que hacen de ellas unas patologías complicadas e incómodas, y son las siguientes:

1. Una sinusitis crónica. Muchas personas no son conscientes de que sus sinos nasales están obstruidos por la sequedad, alergias, etc.
2. Mala morfología de las vías respiratorias. Esto puede deberse a la edad, ya que, con los años, los órganos de la cavidad bucal crecen de forma no proporcionada.
3. Tabaquismo y alcoholismo.
4. Obesidad.
5. Pastillas para dormir.
6. Dormir boca arriba. Algunas personas tienen la costumbre de dormir boca arriba, lo que hace que se obstruya la faringe y la cavidad nasal.
7. La costumbre de respirar por la boca.
8. El estrés.
9. La apnea del sueño.

¿Existen tratamientos para frenarlo?

Varios estudios han determinado que existen algunos tratamientos y recomendaciones que podrían acabar con estos problemas respiratorios. En concreto, existen tres grandes grupos:

• El dietético y postural. Se centra en la pérdida de peso, la reducción del consumo de alcohol y evitar los tratamientos sedantes. También, procurar dormir de lado, y no boca arriba.
• Procedimientos quirúrgicos y/o protésicos. Sirven para corregir la estrechez de la nariz, faringe o lengua.
• Dispositivos protésicos. Estos artilugios se colocan durante el sueño para corregir el problema del paciente a través de dilatadores nasales o dispositivos para la mandíbula.
• Dilatadores nasales.

Estos aparatos sirven para tratar normalmente el ronquido. Sin embargo, existen otros artilugios para el SAOS grave, como la CPAP, conocida como “la maquinita que mete oxígeno a presión”. Este se utiliza en personas que tienen más de 30 apneas o hipopneas por cada hora de sueño.