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El colesterol alto solo se puede detectar mediante un análisis de sangre. Aunque no suele producir síntomas, hay algunas señales sutiles que pueden ayudar a detectarlo. Te explicamos cuáles son.
¿Qué es el colesterol?
El colesterol es una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre. El cuerpo necesita colesterol para formar células sanas, pero tener altos niveles de colesterol puede aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca.
Con el colesterol alto suelen formarse depósitos grasos en los vasos sanguíneos. Con el tiempo, estos depósitos crecen y dificultan que fluya suficiente sangre a través de las arterias. A veces, esos depósitos se rompen de repente y forman un coágulo que podría provocar un infarto al corazón o un accidente cerebrovascular. El riesgo aumenta a partir de los 50 años.
Dieta sana y ejercicio
El colesterol puede heredarse, aunque por regla general es la consecuencia de un estilo de vida poco saludable, por lo que se puede prevenir y tratar. Llevar una dieta sana, hacer ejercicio con regularidad y, si es necesario, tratarlo con la medicación adecuada ayudará a reducirlo.
Es frecuente hablar de colesterol bueno o malo para referirse al colesterol HDL (bueno) y al LDL (malo). El primero está compuesto por una lipoproteína de alta densidad, mientras que en el malo es de baja densidad.
Ambos cuentan con valores de referencia que permiten evaluar el estado de salud de la persona. El rango normal del colesterol bueno, HDL, se sitúa en unos 50 mg/dL. Y el LDL va de 70 a 130 mg/dL. Mientras más bajo tengamos el colesterol malo, más nos alejaremos de sufrir complicaciones de salud.
Uno de los factores más preocupantes del colesterol alto es que las personas que lo padecen no lo saben, puesto que, por regla general, no se manifiesta con síntomas claros. Esta situación conduce al desarrollo de graves trastornos de salud, como la arterioesclerosis, la hipertensión y la insuficiencia renal. Por ello es fundamental conocer qué señales podrían ser determinantes para su detección.
Los síntomas del colesterol alto
La inflamación y sensación de adormecimiento de las extremidades es uno de los síntomas iniciales del colesterol alto. Esta reacción se produce porque los lípidos acumulados impiden la correcta circulación de la sangre y, en consecuencia, se reduce el paso del oxígeno y los nutrientes a los músculos.
Otra señal muy común en las personas que tienen colesterol alto es el mal aliento o halitosis. Dado que el colesterol se segrega en el hígado, su acumulación excesiva dificulta la digestión, lo cual se manifiesta con sequedad y olores desagradables en la boca.
El exceso de lípidos en la sangre y el hígado afecta el metabolismo e impide el desarrollo del proceso digestivo de forma normal, sobre todo cuando tomamos alimentos con altos contenidos de grasa. Esta es la causa por la que los niveles altos de colesterol malo o LDL pueden provocar episodios continuos de indigestión y pesadez.
El colesterol se deposita en las arterias, afecta a la circulación de la sangre e interrumpe la oxigenación celular. Esta circunstancia se manifiesta mediante continuos mareos, pérdida del equilibrio y fuertes dolores de cabeza, según mejorconsalud.as.com.
Problemas visuales
Es frecuente que los pacientes con niveles de colesterol malo alto presenten un abultamiento amarillo en los ojos y sufran irritación y visión borrosa. Otros síntomas del colesterol alto o hipercolesterolemia son episodios comunes de estreñimiento, puesto que la acumulación de lípidos en las arterias afecta al proceso digestivo y disminuye la motilidad intestinal.
Uno de los problemas más comunes asociados al colesterol malo es el dolor en el pecho. Casi siempre es un motivo de consulta médica y, aunque son muchas las enfermedades asociadas a su aparición, en la mayoría de los casos se produce por los efectos nocivos del colesterol.
La sensación de debilidad, la fatiga y el deseo de dormir, en horas no habituales y de forma continua, suelen derivarse de: deficiencias nutricionales, exceso de actividad física o altos niveles de colesterol.
Dentro de los síntomas de la hipercolesterolemia suelen incluirse también las afecciones cutáneas, como la urticaria y otras. A menudo se manifiestan con manchas rojizas, inflamación y una incómoda sensación de picor que suele ser difícil de controlar.
Por ultimo, el desarrollo de intolerancias alimenticias puede deberse a niveles altos de colesterol en la sangre. Aunque se pueden originar por muchos otros factores, la acumulación excesiva de grasa en las arterias y el hígado es una causa común.
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