19/12/2019 - 15:15
Lectura fácil
Ryusei Ouchi es un joven japonés, ciego desde los 7 años, que disfruta como un skater más. Para practicar este deporte utiliza su bastón así puede sentir cualquier barrera física que pueda interponerse en su camino.
Estira su bastón para sentir el borde de la rampa, arrastra los pies hasta el borde y luego se deja caer
Al igual que todos los skateboarders, la velocidad del aire, la emoción del viaje y la sensación de completar una pirueta es parte de lo que atrajo a este joven con discapacidad visual de 19 años.
Ryusei Ouchi podía ver bien cuando nació pero perdió la vista a los siete años. Le diagnosticaron una afección ocular y pese a todo, practica skate en un parque al norte de Tokio.
Deslizándose por altas rampas, Ouchi ha impresionado a la comunidad local de skaters. Ya se ha ganado un gran número de seguidores en las redes sociales.
Es muy consciente de los peligros, pero asegura que es algo que va implícito a este deporte
Ouchi comenzó a usar la tabla a los 15 años cuando se aceleró su pérdida de visión. Practicar skate con amigos le dio a una forma de expresarse. Nuestro protagonista asegura que le llevó tiempo acostumbrarse completamente al deporte, pero ahora tiene una buena imagen mental de su entorno. Algo que le libera para realizar más piruetas.
El skateboarding se presentará como un nuevo deporte en los Juegos Olímpicos de Tokio del próximo año
Pero no será así para los Juegos Paralímpicos. Ryusei Ouchi espera que algún día sea una realidad.
El skateboarding, regularmente abreviado como skate, presenta dos modalidades en Tokio 2020: street y park.
El skate nació en las calles y ese es su hábitat natural, de manera que la modalidad street solo recrea los elementos que existen en un cono urbano y allí los atletas deberán realizar su mejor performance.
Así, veremos algunos trucos que tienen nombres conocidos en la comunidad, como grinds, slides, ollies, entre otros. Son saltos y maniobras con la patineta.
Añadir nuevo comentario