Los españoles aguantamos mejor las temperaturas extremas: tanto el frío como el calor

Un estudio de la mano del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) afirma que la población de España se ha ido adaptando desde 1989 para el frío y desde el 2009 para el calor. De esta forma, nuestro país es uno de los que más soporta las temperaturas extremas.

El cambio climático es el principal responsable de las temperaturas y de las continuas olas de calor durante el verano.

Las personas tienden a adaptarse a las temperaturas extremas

En estos días estamos experimentando el frío más intenso desde hace muchos años. Lo mismo ha ocurrido durante los meses de verano, donde las continuas olas de calor han provocado daños en nuestro medio y en nuestra salud debido a las fuertes temperaturas.

Con ello, un estudio elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) muestra que la población de España se ha ido adaptando de manera progresiva a las temperaturas extremas, más concretamente, desde 1989 para el frío y desde el 2009 para el calor.

La investigadora principal del estudio, Dariya Ordanovich, ha señalado que “en la actualidad, España es uno de los países más afectados por el aumento de las temperaturas y las olas de calor dentro de la región Mediterránea”.

Así, todas las personas tienden a adaptarse a las nuevas condiciones climáticas, tanto las desfavorables como las más favorables, ya que las temperaturas extremas son cada vez más comunes a lo largo de los años.

La mortalidad por frío es tres veces más baja

Los datos del estudio de esta investigación han demostrado que la mortalidad por el frío ha disminuido casi tres veces. Sin embargo, el riesgo por el calor extremo ha presentado una bajada mucho menor, lo que hace que aumente la preocupación.

En cuanto a la temperatura mínima de mortalidad, donde el riesgo de fallecimiento es menor, disminuyó entre 2009 y 2018, donde el umbral de temperatura óptima aumentó casi dos grados en España.

El estudio sobre temperaturas extremas, tanto para el frío como para el calor, muestra un rango mucho más amplio. De hecho, los expertos consideran que la adaptación de estas temperaturas en nuestro país ha venido de forma progresiva, no de forma directa.

Sin embargo, a pesar de que ha aparecido una nueva adaptación a las temperaturas extremas, sigue existiendo un riesgo muy elevado en cuando al calor extremo, tal y como hemos podido experimentar este verano.

España debe desarrollar una estrategia para adaptarse al cambio climático

Cuando hablamos sobre el avance de las temperaturas extremas, es importante que España priorice una estrategia de adaptación al cambio climático, ya que es el principal responsable de que ocurran estos fenómenos, tanto las olas de calor como las grandes nevadas.

Ante esta situación, y con la inflación como principal problema económico para el país, se recomienda llevar a cabo una serie de medidas que ayuden a reducir sus consecuencias, tanto en el medio como en la salud de los ciudadanos, sobre todo la población vulnerable, quienes más peligro corren durante estos episodios climáticos.