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Las altas temperaturas y la llegada del verano hacen que muchas personas se replanteen la idea de solventar esos calurosos días con el aire acondicionado o el ventilador, para gastar menos.
Aun así, existen otras formas de acabar con esas insoportables temperaturas: son las cortinas térmicas, o contar con una instalación de toldo para mantener una temperatura óptima a la vez que ahorras dinero.
“Un buen toldo puede ser fundamental para ofrecer sombra en la fachada”
El uso de un toldo es fundamental para conseguir sombra en toda la vivienda y así, poder aislar las altas temperaturas dentro del hogar. Un toldo puede reducir la temperatura en el interior hasta en 10 grados.
Su buen funcionamiento dependerá del color y del material del que esté hecho. Gracias a él se puede reducir el consumo del aire acondicionado hasta en un 40 %, algo fundamental en esta época afectada por la subida de luz.
Qué color de toldo protege más del calor
Es importante a la hora de adquirir un tipo de mecanismo como este, saber cuál es el color clave para proteger el interior de la vivienda del calor exterior. En general, los colores oscuros como el negro tienden más a absorber la luz, y los más claros todo lo contrario. En el caso de los toldos y las lonas la situación es diferente.
Por ello, los colores oscuros producen una mayor sombra por lo que aíslan de manera eficaz el calor. Además, liberan más rápidamente ese calor. Es la mejor opción a la hora de instalar un mecanismo para repeler el calor.
En cuanto a los colores más fríos, ofrecen una sensación de frescura, los colores cálidos, en cambio, aumentan la sensación de calor. La calidad de la tela o el material usado para elaborar dicho toldo o lona será importante a la hora del aislamiento del calor.
Hoy en día es muy común contar con un mecanismo de estas características, pero si la vivienda se encuentra en una comunidad de vecino, hay que pedir permiso para instalarlo, incluso a veces el color debe ser el mismo para todo el bloque.
¿Aire acondicionado o ventilador?
La mayoría de las personas optan por instalar un aire acondicionado en sus casas, sobre todo en zonas de mucho calor. Otras, sin embargo, mantienen el tradicional ventilador. Y sí es cierto eso de que el aire acondicionado consume mucha más energía, lo que se termina notando en la factura de la luz.
La diferencia es que el ventilador mueve únicamente el aire a través de sus aspas, el aire acondicionado enfría el aire por lo que se considera como un método más eficaz. Sin embargo, esta diferencia se hace eco en los números y facturas de la luz.
Es importante saber que, aunque el ventilador consuma menos energía, se establecen diferencias entre los ventiladores de techo, que consumen más, a los de pie. También hay que destacar que, aunque consuma menos, es importante usarlo solo cuando alguien se encuentre dentro de la casa, no fuera.
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