La ONU prevé que el 60 % de los urbanitas serán menores de 18 años en 2030

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31/10/2024 - 18:00
Jóvenes caminando por una calle

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Para 2030, se espera que el 60 % de los urbanitas tengan menos de 18 años, y cerca del 70 % de la humanidad vivirá en ciudades para mediados de siglo. En el marco del Día Mundial del Hábitat, la ONU destacó la importancia de involucrar a los jóvenes en la creación de un futuro urbano sostenible.

El secretario general, António Guterres, señala que la juventud es clave para transformar los desafíos urbanos en oportunidades, especialmente en regiones con crecimiento acelerado como Asia y África, donde las tasas de fertilidad son altas y la población urbana es predominantemente joven.

La importancia de las ciudades sostenibles  

El rápido crecimiento urbano plantea la necesidad urgente de ciudades sostenibles que puedan satisfacer las necesidades de una población cada vez mayor, especialmente en términos de vivienda, infraestructura y servicios básicos.

Las ciudades sostenibles buscan minimizar su impacto ambiental, fomentar la eficiencia energética y proporcionar espacios inclusivos para todos los residentes. Invertir en infraestructuras resilientes y en políticas de desarrollo urbano que prioricen la sostenibilidad y la equidad es crucial para asegurar que las ciudades no solo crezcan en tamaño, sino también en calidad de vida para sus urbanitas.

Inversión en la juventud y el desarrollo sostenible  

Para construir un futuro urbano equitativo, es esencial invertir en educación y habilidades digitales que permitan a los jóvenes urbanitas liderar iniciativas de acción climática y desarrollo sostenible. Estas iniciativas son fundamentales para abordar problemas como la contaminación, el acceso al agua potable y el transporte eficiente. La participación activa de los jóvenes puede impulsar proyectos de vivienda sostenible y movilidad urbana que reduzcan las emisiones de carbono y mejoren la calidad del aire, factores críticos en un contexto donde la urbanización global continúa acelerándose.

Las ciudades del futuro, con la juventud urbanita como protagonista, tienen la oportunidad de convertirse en modelos de sostenibilidad y equidad, adaptándose a los desafíos actuales y creando un entorno más habitable para las generaciones futuras.

La importancia de la emancipación juvenil para el desarrollo personal y social

La emancipación juvenil es un paso crucial en la transición hacia la vida adulta, ya que permite a los jóvenes desarrollar independencia económica y emocional. Vivir por cuenta propia implica adquirir habilidades fundamentales, como la gestión financiera, el cuidado del hogar y la toma de decisiones responsables. Esta autonomía contribuye al crecimiento personal, reforzando la autoestima y fomentando la confianza en sus capacidades. 

Desde un punto de vista social y económico, la emancipación tiene un impacto positivo en el entorno. Los jóvenes urbanitas emancipados se integran en el mercado laboral de forma más activa, lo que impulsa el consumo, la innovación y el desarrollo económico. Además, su participación en la vida cívica y política ayuda a construir sociedades más dinámicas y diversas, aportando nuevas perspectivas a la toma de decisiones.

Sin embargo, la dificultad para acceder a viviendas asequibles y empleos de calidad retrasa la emancipación en muchos países. Esta situación genera una dependencia prolongada de los núcleos familiares y puede impactar negativamente en el bienestar psicológico de los jóvenes, provocando frustración y limitando su crecimiento personal. Por eso, políticas públicas que faciliten el acceso a la vivienda, empleo digno y formación son esenciales para garantizar un proceso de emancipación más accesible y equilibrado.

Además, la emancipación juvenil es clave en el contexto de las ciudades en crecimiento. Los jóvenes no solo necesitan viviendas asequibles, sino que también deben participar activamente en la construcción de comunidades sostenibles. Ciudades que prioricen espacios de participación, empleo verde y políticas de movilidad eficiente no solo permitirán la emancipación, sino que prepararán a las nuevas generaciones para liderar el cambio hacia un futuro más justo y sostenible.

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