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Ya estamos dentro de una nueva ola de calor, y con ello, nos vuelve a surgir la duda de qué debemos hacer con las ventanas del hogar, cuando abrir para ventilar y cuando cerrar todo 'a cal y canto'.
En invierno lo tenemos claro, para ventilar el hogar, basta entre 5 y 10 minutos para airear y renovar el aire de nuestra casa, y después, todo cerrado para poder conservar mejor el calor de la calefacción y no gastar de más en la factura de la luz.
Claro, que cuando llega la época veraniega, nos volvemos un poco locos porque muchas veces el ambiente se carga y se necesita ventilar, pero afuera parece que están tirando fuego contra el asfalto y los muros de las casas... ¿entonces?
Abrir las ventanas en verano, todo un reto para evitar abrasarse
Los termómetros suben como la espuma y el sol golpea nuestras casas con puño de fuego, y el eterno debate de abrir las ventanas o dejar todo bien cerrado, incluidas las persianas bajadas hasta el tope, vuelve a resurgir como un remolino.
Hagas lo que hagas y pase lo que pase, del calor no te va a librar nadie, y es que algunas zonas ya han experimentado durante este verano, los 44ºC, por lo que para muchos, andar por las calles será algo similar a estar dando vueltas en un horno cual pollo asado.
Lo recomendable en estas situaciones, es resguardarse en el interior de las casas, pero claro, ¿cómo debemos tener las ventanas?.
Lo primero, es bueno que, en la medida de lo posible, contemos con buenos sistemas para mantener la temperatura del hogar y poder estar algo más frescos.
En caso de no poder, los expertos son claros al respecto del uso de las ventanas para refrigerar nuestro hogar:
- Horas centrales del día: Debemos mantener las ventanas cerradas y bajar las persianas hasta abajo. Esto se recomienda cuando la temperatura en el exterior es mucho más elevada que la del interior del hogar, por lo que nos encontramos ante una acción necesaria e imprescindible en esta época del año.
- Horas nocturnas: Por norma general, las temperaturas suelen descender a estas horas del día. Al no estar el sol dando directo con sus rayo y calentando cada rincón, podemos comenzar abriendolas. Aprovechamos la madrugada, porque suele correr aire, con lo que evitamos el calor extremos y aireamos el hogar.
Ventilar, algo necesario en cualquier época del año
Primero, cabe destacar, que aunque contemos con aire acondicionado u otros sistemas para refrigerar nuestro hogar, es importante abrir las ventanas y dejar que el aire del interior se renueve.
Pero si no contamos con ninguno de este tipo de aparatos, abriendo las ventanas a las horas recomendadas, evitamos que las temperaturas altas afecten a la temperatura del interior de nuestro hogar. Claro que, con el calor extremo, a veces es imposible, pero seguro que en algún momento de las horas nocturnas, podemos aprovechar algún que otro 'chorrito' de aire para poder renovar el aire interior y refrescarnos, aunque sea un poquito.
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