Este es el perfil de los votantes de Vox, según Tezanos

Vox es un partido político en España. Fue fundado en 2013 y se identifica como un partido de derechas. Su nombre completo es "Vox - Partido de la Abstención Activa" y su líder más prominente es Santiago Abascal.

El partido defiende posiciones conservadoras y nacionalistas, promoviendo políticas que abarcan desde la reducción de la inmigración hasta la centralización del poder en el gobierno central. También se ha destacado por su oposición al separatismo y la descentralización del poder en regiones como Cataluña y el País Vasco.

Vox ha ganado relevancia en el panorama político español en los últimos años y ha obtenido representación en el Congreso de los Diputados en las elecciones generales. Aunque inicialmente era un partido minoritario, su crecimiento ha sido notable, atrayendo a votantes con diversas preocupaciones y puntos de vista conservadores.

Es importante tener en cuenta que Vox ha sido objeto de controversia debido a algunas de sus propuestas y discursos, que han sido considerados por algunos como polarizadores y contrarios a los valores democráticos. Su presencia en la política española ha generado debates sobre el rumbo político y social del país. Pero, ¿cómo son los votantes de Vox?

Perfil de los votantes de Vox

¿Cómo es el perfil de los votantes de Vox según los datos sociodemográficos de la última encuesta del CIS?

De acuerdo con la estimación, los votantes de Vox son generalmente hombres, con un 12,3 % de hombres frente a solo un 5,3 % de mujeres.

En cuanto a la edad, la mayoría de los votantes de Vox (12,3 %) se encuentra en la franja más joven, entre 18 y 24 años. Le siguen los grupos de edad de 35 a 44 años (11,3 %) y de 25 a 34 años (11,1 %). Por otro lado, el menor porcentaje de votantes de Vox tiene 75 años o más.

En relación a la educación, la mayoría de los encuestados que votan a Vox tienen estudios de Formación Profesional (11,4 %), seguidos por estudios secundarios de segunda etapa (10,0 %) y de primera etapa (9,3 %). El 7,6 % cuenta con estudios superiores, mientras que un 4,8 % no tiene estudios.

Vox sigue siendo una fuerza política que atrae principalmente a votantes jóvenes y masculinos

Con un perfil educativo variado que abarca desde Formación Profesional hasta estudios superiores. Estos datos serán relevantes para el desarrollo de las siguientes campañas y elecciones generales en España.

Los extremos políticos no son buenos por varias razones fundamentales (y eso, los votantes de Vox deberían saberlo):

1. Polarización y división: Los extremos políticos tienden a promover visiones radicalmente opuestas y polarizadas, lo que lleva a una mayor división en la sociedad. Esto puede generar conflictos y confrontaciones entre grupos con puntos de vista irreconciliables, debilitando la cohesión social.
2. Falta de consenso y negociación: Los extremos políticos suelen estar inflexiblemente comprometidos con sus ideologías y objetivos específicos, lo que dificulta la búsqueda de consensos y la negociación entre distintas fuerzas políticas. La falta de diálogo puede obstaculizar la adopción de políticas que beneficien a toda la sociedad.
3. Estancamiento legislativo: La presencia de extremos políticos puede generar un estancamiento legislativo, ya que ambas partes pueden bloquear propuestas y reformas que no se ajusten a sus posiciones ideológicas. Esto puede impedir el progreso y la solución de problemas urgentes.
4. Riesgo de políticas extremas: Los extremos políticos pueden llevar a la adopción de políticas extremas y radicales que no consideren todas las implicaciones y consecuencias a largo plazo. Estas políticas pueden ser perjudiciales para la economía, los derechos humanos y el bienestar general de la población.
5. Intolerancia y discriminación: Los extremos políticos pueden fomentar actitudes intolerantes y discriminatorias hacia aquellos que no comparten sus creencias o pertenecen a grupos minoritarios. Esto puede socavar los valores democráticos y la igualdad de derechos para todos los ciudadanos.
6. Reducción del debate público: La presencia de extremos políticos puede reducir el espacio para el debate público constructivo y basado en evidencia. En lugar de discutir ideas y soluciones, se pueden priorizar ataques personales y discursos incendiarios.

En general, un enfoque político más moderado y centrado en el consenso suele ser más efectivo para abordar los desafíos y necesidades de una sociedad diversa. El diálogo, la tolerancia y el respeto mutuo son fundamentales para mantener una democracia sana y promover el bienestar común de todos los ciudadanos.