El 5 de noviembre, una semana después del paso de la DANA, el Consejo de Ministros aprobó un primer paquete de medidas urgentes destinadas a ayudar a los damnificados por la catástrofe, que ha dejado cientos de fallecidos.
Los niños constituyen uno de los colectivos más vulnerables en términos psicológicos tras el paso de la DANA por la provincia de Valencia, presentando mutismo, pesadillas recurrentes, miedo a salir a la calle y renuencia a hablar de lo sucedido.
En toda situación de emergencia los más vulnerables son los que más sufren. En caso de las personas con discapacidad intelectual y sus familias, no solo tienen que enfrentarse a las mismas pérdidas que el resto, sino que tienen que hacerlo con menos recursos.
Acción contra el Hambre trabaja en municipios de Valencia, limpiando lodo y distribuyendo kits de higiene para prevenir infecciones. Colabora con autoridades para reducir riesgos sanitarios y mejorar condiciones de agua.
Montse Alabarta vive muy cerca del barranco del Poyo, en Picaña, una localidad ribereña que se vio inundada. Aferrada a su silla de ruedas por una enfermedad, ha visto cómo el agua arrollaba las aceras de su pueblo o casi acaba con su vida.