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Las alergias alimentarias son reacciones del sistema inmunitario que ocurren después de consumir ciertos alimentos. Incluso una pequeña cantidad del alimento alérgeno puede desencadenar síntomas como problemas digestivos, urticaria o inflamación en las vías respiratorias.
De acuerdo con Mayo Clinic, en algunos casos, las alergias alimentarias pueden causar síntomas graves o incluso una reacción potencialmente mortal conocida como anafilaxia.
¿Cuáles son los síntomas de una alergia alimentaria?
Los síntomas más comunes pueden variar según la persona y el tipo de proteína presente en el alimento alérgeno, así como su resistencia a ser destruida por el calor o los jugos gástricos.
Cuando se consume un alimento alérgeno, es posible sentir una leve sensación de picor en la boca, que posteriormente puede convertirse en inflamación.
Las vías respiratorias pueden inflamarse y experimentarse una sensación de cierre. Los principales síntomas que se pueden manifestar son:
- Hormigueo o picor en la boca.
- Urticaria, comezón o eccema.
- Hinchazón de los labios, cara, lengua, garganta u otras partes del cuerpo.
- Sibilancias, congestión nasal o dificultad para respirar.
- Dolor abdominal, diarrea, náuseas o vómitos.
- Mareos, aturdimiento o desmayos.
¿Cómo prevenir las alergias alimentarias?
Durante las últimas décadas, ha habido un aumento significativo de las enfermedades alérgicas. Aunque parece que la prevalencia del asma se está estabilizando, las alergias alimentarias y la anafilaxia están en claro aumento, según el médico pediatra Luis Ángel Echeverría Zudaire del Hospital Universitario Severo Ochoa.
El desarrollo de una alergia alimentaria está influenciado por factores hereditarios y ambientales. En el estudio "Novedades en diagnóstico y prevención de la alergia alimentaria", se plantea que un niño puede sensibilizarse a través de los alimentos consumidos por la madre durante el embarazo.
Los huevos, la leche y los frutos secos son alimentos comunes que pueden causar alergias
La prevención es fundamental para identificar posibles alérgenos que puedan causar daño.
El médico Echeverría recomienda:
- No fumar durante el embarazo.
- Tener un parto sin cesárea.
- Seguir una dieta equilibrada rica en frutas, vegetales y fibra.
- Amamantar durante al menos 6 meses.
- Introducir alimentos sólidos entre los 4 y 6 meses de edad.
- Probar el huevo cocido antes de los 6 meses puede reducir la incidencia de alergia al huevo.
- Introducir cacahuetes antes de los 11 meses en niños con eccema grave o alergia al huevo puede reducir la incidencia de alergia al cacahuete.
También se sugiere realizar pruebas de alergia con un médico, que pueden incluir pruebas cutáneas o análisis de sangre para determinar si una persona es alérgica a ciertas sustancias.
En algunas personas, las alergias alimentarias pueden provocar síntomas de asma.
Los productos químicos liberados por el sistema inmunitario causan los signos y síntomas de la alergia, como congestión nasal, secreción nasal, ojos hinchados o picazón. Para algunas personas, esta misma reacción también afecta los pulmones y las vías respiratorias, lo que conduce a síntomas de asma.
Aunque generalmente las alergias alimentarias van acompañadas de asma, esta enfermedad respiratoria también puede desencadenarse por el ejercicio, las infecciones, el aire frío, el reflujo gastroesofágico o el estrés.
¿Intolerancia o alergia alimentaria?
Cuando el organismo rechaza un alimento porque lo considera perjudicial, se produce una intolerancia. A diferencia de las alergias, en este caso no está involucrado el sistema inmunitario, sino que se trata de un problema metabólico y digestivo. Los síntomas más frecuentes de la intolerancia alimentaria incluyen náuseas, diarrea, gases, dolor abdominal, irritabilidad, nerviosismo y dolor de cabeza.
En el caso de las intolerancias alimentarias, los síntomas ocurren solo después de la ingesta del alimento en cuestión, no por la exposición al mismo como ocurre con las alergias alimentarias.
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