¿Podrían los alimentos reducir nuestro estrés?

El estrés se ha convertido en el enemigo público número uno. Y no es para menos. No solo porque hace una importante mella en nuestra salud mental, sino también porque tiene importantes implicaciones en nuestra salud física, el estrés ha acabado estando en el mundo de mira para muchas personas. El ritmo de vida que llevamos y otros estimulantes como las nuevas tecnologías, o los propios alimentos, lo alimentan a diario.

Y sí, aunque pueda no parecerlo, todo aquello que comemos puede ser un factor a favor o en contra de elevar los niveles de la hormona del cortisol, la principal responsable de desencadenar los procesos de estrés en nuestro organismo. Es cierto que una cantidad controlada de esta hormona es necesaria para un correcto funcionamiento, el exceso puede traernos serios problemas. La doctora María Victoria Martín, facilitó una entrevista al medio digital El Español, en la que respondía a preguntas claves sobre los alimentos y su relación con esta hormona.

Los alimentos y sus efectos con el estrés

La doctora especializada en metabolismo y nutrición, formada en la Universidad de Navarra, con una experiencia de más de 30 años en la atención a pacientes con obesidad y otros trastornos nutricionales, explica la estrecha relación que existe entre los alimentos, nuestro estado de ánimo y también la cantidad de estrés que puede llegar a generarnos la alimentación de forma general. En este sentido, explica que hay algunos alimentos que pueden ayudarnos a reducir los niveles de este último.

Para llegar a estas conclusiones, la experta explica que es necesario tener en cuenta algunos factores, como los niveles de azúcar en sangre, la cantidad de hambre o saciedad, la hidratación y todas aquellas vitaminas y minerales que contribuyen a un buen funcionamiento de la química cerebral. La relación de todos estos aspectos con el estrés es directa, ya que cuando nuestro cuerpo se encuentra deshidratado, tiene hambre o los niveles de azúcar están muy elevados, se pondrá en alerta.

De la misma forma, si no consumimos productos de calidad, es decir, ricos en vitaminas, fibras y minerales, las hormonas como la serotonina o elementos como el triptófano, no tendrán suficiente "combustible" para ponerse en marcha de forma adecuada.

Los alimentos que nos benefician y los que no

Teniendo en cuenta esto, lo primero que debemos saber para que nuestra alimentación contribuya a reducir los niveles de estrés que se genera en el interior de nuestro cuerpo, es que necesitamos mantenernos hidratados y bien alimentados. ¿Cómo podemos conseguir esto último? consumiendo alimentos como por ejemplo "el plátano porque es rico en triptófano, clave para crear serotonina (la hormona de la felicidad). El té verde, el salmón, los frutos secos, como nueces, anacardos y almendras (crudos y sin sal)".

De esta misma forma, existen ciertos alimentos que causarán un efecto contrario generándonos aún más estrés, como pueden ser "los azúcares, carbohidratos de absorción rápida, como el pan, las galletas, los cereales, la pasta y el arroz blanco. La bollería industrial y los alimentos de alto contenido graso. Este tipo de alimentos pueden reducir la producción de serotonina que controla las emociones y el estado anímico", explica la especialista.