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Los antidepresivos son medicamentos recetados por profesionales médicos para tratar diversos trastornos del estado de ánimo, como la depresión, la ansiedad, el trastorno obsesivo-compulsivo y otros trastornos psicológicos. Se consideran útiles y efectivos en muchos casos para ayudar a estabilizar el estado de ánimo y reducir los síntomas de estas condiciones.
Es importante destacar que el uso de antidepresivos debe ser supervisado por un médico, ya que cada persona responde de manera diferente a estos medicamentos y pueden tener efectos secundarios.
Tomar antidepresivos sin una receta médica o sin supervisión puede ser peligroso y no se recomienda, ya que puede aumentar el riesgo de efectos secundarios adversos y complicaciones de salud.
Es cierto que el uso de antidepresivos es común y puede haber casos en los que algunas personas intenten automedicarse o tomar estos fármacos sin una prescripción médica. Sin embargo, esto no es seguro y puede llevar a problemas de salud graves. Lo más importante es buscar orientación médica y seguir las indicaciones del profesional de la salud para recibir el tratamiento más adecuado y seguro para cada caso específico.
Según un informe de la OCDE, España se posiciona como el tercer país de la Unión Europea en consumo de antidepresivos, con un crecimiento del 18 % en el uso de estos medicamentos entre 2019 y 2022, en medio de la crisis de la COVID-19.
En 2022, el consumo de antidepresivos se situó en 98,4 dosis diarias por cada 1.000 habitantes, superado solo por Portugal (150,5) y Suecia (114,5).
Este incremento fue común en la UE, con una media de 70,3 dosis diarias por 1.000 habitantes, experimentando ese 18 % desde 2019, antes del surgimiento del coronavirus.
Datos sobre trastornos mentales en España
En 2019, alrededor del 6 % de los habitantes en España reportaron sufrir depresión, mientras que en la UE la media fue del 7 %.
Según el Instituto para la Cuantificación y Evaluación de la Salud (IHME), un 18 % de los españoles padecían trastornos mentales, un porcentaje similar al observado en la Unión Europea, situado entre el 16 % y 17 %.
Los costos directos e indirectos de estas enfermedades representaron el 4,2 % del PIB en España y el 4,1 % en la UE en 2015. En 2021 y 2022, un 18 % de los ciudadanos españoles identificaron necesidades médicas sin satisfacer, de los cuales el 20 % estaba relacionado con la salud mental, cifra similar al 2 2% en toda la Unión Europea.
Relación entre consumo de antidepresivos y salud mental
A pesar del aumento en el uso de antidepresivos, se aclara que esto no necesariamente indica una mayor prevalencia de problemas de salud mental.
Los datos reflejan cierta equiparación en las estadísticas de trastornos mentales en comparación con otros países de la UE, y aunque hay una demanda notable de atención médica en esta área, no todos los casos están asociados directamente al consumo de medicamentos antidepresivos.
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