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¿Por qué ocurrió la terrible explosión este pasado martes en Beirut?
En la capital del Líbano fallecieron al menos 100 personas y más de 4.000 resultaron heridas. Al parecer, la causa de la explosión fue un cargamento de nitrato de amonio de 2.750 toneladas sin custodiar, aunque todavía se desconoce el origen y si fue intencionado.
Qué es el nitrato de amonio, la sustancia responsable de la explosión en Beirut
El nitrato de amonio es un compuesto que ya ha demostrado su peligro en el pasado. Se trata de un sólido cristalino que se fabrica en cantidades industriales y que se usa mayoritariamente como fuente de fertilizantes, pero también en la industria minera.
"El nitrato de amonio es uno de los fertilizantes más utilizados para la agricultura en todo el mundo. También se usa en la fabricación de explosivos", explicó a BBC Brasil Reinaldo Bazito, profesor del Instituto de Química de la Universidad de Sao Paulo.
Según el experto, el nitrato de amonio suele almacenarse en grandes cantidades por la alta demanda de los agricultores para usarlo como fertilizante. Sin embargo, para que haya una explosión, debe existir una combustión previa.
El almacén que explotó contenía 2.750 toneladas de nitrato de amonio, que se encontraban en el lugar sin control ni vigilancia desde hacía seis años.
¿Dónde se produjo exactamente la explosión?
El incidente se produjo en el puerto de Beirut. El puerto es uno de los lugares clave para la economía del Líbano, que actualmente está sumida en una de sus peores crisis económicas desde el final de su guerra civil en 1990.
En el marco la fuerte tensión política que vive el Líbano, las calles de Beirut han sido protagonistas recientemente de manifestaciones ciudadanas contra el Gobierno.
En concreto, la explosión cuyas imágenes han dado la vuelta al mundo, sucedió días antes de que un tribunal de Naciones Unidas revele el polémico veredicto sobre el asesinado del ex primer ministro Rafik Hariri en 2005, atribuido al movimiento islámico armado Hezbollah.
Entonces, ¿fue una explosión intencionada?
La ONU y la Casa Blanca están investigando los hechos. Donald Trump ha llegado a la conclusión de que la explosión en Beirut fue en realidad un "ataque" con "algún tipo de bomba". Para el líder americano, "esto no fue un suceso tipo una explosión industrial", dijo sugiriendo que había sido un atentado.
El primer ministro libanés, Hasan Diab, prometió que los responsables de la gran explosión que sacudió Beirut van a "pagar el precio". Diab afirmó que "esta catástrofe no pasará sin responsabilidades" y que hacer justicia es la labor del Gobierno.
Las tensiones con Israel, país limítrofe por el sur del Líbano, siembran sospechas en el país. La semana pasada, las autoridades israelíes acusaron un supuesto intento de infiltración en su territorio por parte de Hezbollah.
La Organización del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares está analizando los datos de la gran explosión. Hasta ahora, no hay indicios de eventuales materiales nucleares en la explosión, ni parece probable.
"Era como una bomba atómica"
Los testimonios de los supervivientes, publicados en varios medios de comunicación, permiten reconstruir los momentos posteriores tras la explosión en Beirut.
Numerosas víctimas fueron arrojadas al mar, y el distrito portuario ha quedado reducido a escombros.
LA AFP publica el testomionio de Makruhie Yerganian, un profesor jubilado libanés que vive desde hace más de sesenta años frente al puerto Él mismo afirma que la explosión fue como una bomba atómica. "He visto de todo (en mi vida), pero nunca vi nada semejante", declaró Yerganian.
Las imágenes de la explosión dejan personas ensangrentadas huyendo de la zona del puerto mientras solicitaban auxilio, entre nubes de humo y polvo que cubrían unas calles cubiertas de los restos de edificios, coches y muebles.
"En el interior del puerto es una catástrofe. Hay cadáveres en el suelo. Las ambulancias se llevan los cuerpos", dijo a la AFP un soldado situado en las inmediaciones que se encontraba buscando a su hijo.
Varias horas después de la tragedia, los helicópteros seguían vertiendo agua del mar para intentar apagar las llamas.
Fotos publicadas en las redes sociales muestran daños más allá del puerto de Beirut, por ejemplo en el interior de la terminal del aeropuerto, situada a nueve kilómetros del lugar de las explosiones.
Las medidas tomadas por el coronavirus, como el teletrabajo y las clases online para los más pequeños, han evitado que en algunos edificios de Beirut haya que lamentar mayores víctimas.
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