Nace 'Ciudades y pueblos para vivir' para impulsar el turismo sostenible

Diversas organizaciones sociales, ecologistas y plataformas han unido fuerzas para crear Ciudades y Pueblos para Vivir, una iniciativa nacida con el objetivo de contrarrestar los efectos negativos del turismo masivo. Esta coalición, compuesta por más de 50 colectivos que luchan contra la turistificación, busca mitigar los impactos ambientales y sociales que genera el turismo descontrolado en muchas ciudades y pueblos. Esta iniciativa busca concienciar sobre los problemas que provoca el crecimiento desmedido de la industria turística.

Según Ecologistas en Acción, una de las organizaciones que impulsa esta iniciativa, el turismo ha dejado de ser una fuente de riqueza para las comunidades locales, y ha pasado a ser una amenaza para el bienestar social, el medio ambiente y los derechos de los habitantes de estas zonas.

Impacto del turismo en la vivienda y el espacio público

Uno de los principales problemas señalados por Ciudades y Pueblos para Vivir es la turistificación de la vivienda. El crecimiento de alojamientos turísticos, especialmente en las principales ciudades, ha llevado al aumento desmesurado de los precios de los alquileres, afectando el acceso a viviendas asequibles para los residentes locales. En lugar de beneficiar a la comunidad, el turismo ha empobrecido a muchos vecinos, expulsándolos de sus hogares y alterando profundamente la estructura social de los barrios. 

La proliferación de viviendas de uso turístico, muchas de ellas ilegales, ha exacerbado esta crisis habitacional. La plataforma exige la declaración de zonas tensionadas, el cierre de viviendas turísticas no reguladas y una moratoria para nuevos permisos de este tipo de alojamientos. Asimismo, reclaman el fin de la economía sumergida y demandan condiciones laborales dignas, como salarios justos y el reconocimiento de enfermedades profesionales para los trabajadores del sector.

Además, esta coalición señala que el turismo ha llevado a la privatización del espacio público. Lo que antes era patrimonio de las ciudades y pueblos ha pasado a convertirse en un negocio rentable para una minoría de grandes propietarios, turoperadores y fondos de inversión internacionales, excluyendo a la población local del uso y disfrute de estos espacios.

Hacia un turismo sostenible y responsable

Ciudades y Pueblos para Vivir plantea la urgencia de promover un modelo de turismo sostenible que respete tanto a las comunidades locales como al medio ambiente. Para ello, proponen la diversificación económica hacia actividades productivas que sean sostenibles, alejadas de la explotación turística masiva.

La plataforma subraya la importancia de proteger los derechos de los trabajadores y el acceso a la vivienda, al tiempo que se fomenta un turismo que no degrade el entorno ni la calidad de vida de los residentes.

De esta manera, esta iniciativa propone una revisión profunda del modelo turístico actual, abogando por un enfoque más justo, sostenible y respetuoso con las comunidades y el medio ambiente.